Japón no remonta, y para ello necesita tomar medidas. Una de las que podría tomar el primer ministro Shinzo Abe es volver a subir el IVA. Lo subió ya en 2012 con un objetivo: hacer frente al costoso sistema de Seguridad Social de un país que envejece cada día más rápido y para pagar la histórica deuda del país. La subida del IVA supuso un frenazo al consumo. Y ahora lo vuelve a hacer. La primera vez que se tomó esta medida, Abe no estaba en el Gobierno, fue un parlamento en el que dominaba el centro izquierda el aprobó esa medida, aunque sí que se puso en marcha durante su mandato.
Ahora cree oportuno subirlo por segunda vez, y para ello piensa en adelantar las elecciones porque en su programa electoral no estaba esa medida. Nada que ver con lo que ocurre en España, cuando Rajoy subió el IVA a los pocos meses de estar en el Gobierno cuando ganó las elecciones prometiendo bajar impuestos.
El primer ministro nipón, Shinzo Abe, baraja disolver la Cámara Baja y convocar elecciones anticipadas debido a la decisión que debe afrontar su Gobierno ante una controvertida subida del IVA para 2015, según explicaron hoy fuentes del Gobierno japonés a la agencia Kyodo.
«El primer ministro está considerando diversas opciones y una de ellas es convocar elecciones legislativas para final de año», dijo la fuente, que optó por el anonimato.
Un dirigente -que también pidió el anonimato- del gobernante Partido Liberal Demócrata (PLD) de Abe afirmó que el primer ministro «podría disolver la cámara, como pronto, el próximo 19 de noviembre», dos días después de que el jefe de Gobierno nipón retorne de la cumbre de líderes del G20 en Brisbane (Australia).
El Ejecutivo había anunciado que tomaría una decisión sobre si subir o no el impuesto sobre el consumo del 8 % actual al 10 % el año próximo, después de analizar el impacto que la subida de este año ha tenido en el Producto Interior Bruto (PIB) nipón de julio-septiembre, datos que se publican el 17 de noviembre.
No obstante, cada vez son más los miembros del PLD que consideran que Abe necesitará la legitimidad de las urnas para tomar una decisión tan controvertida.
El Parlamento nipón ya acordó a finales de 2012 llevar a cabo una subida del gravamen en dos tramos (del 5 al 8 % en 2014 y hasta el 10 % en 2015) para hacer frente a los costes cada vez mayores del sistema de seguridad social en el envejecido país asiático sin incrementar más su deuda pública, la mayor del mundo desarrollado.
No obstante, la subida que se llevó a cabo este año, la primera en 17 años en Japón, golpeó duramente al consumo (motor de la economía nipona) y el PIB se contrajo un 7,1 % anualizado en abril-junio.
Japón solo ha vivido tres subidas de este impuesto en su historia, y es aún un país muy sensible al incremento del IVA, una medida emocionalmente ligada a la pesadumbre económica.