Los carabineros italianos anunciaron el miércoles que abrieron una investigación preliminar en el «caso Agnelet», el proceso sobre la desaparición en 1977 de Agnès Le Roux, heredera del casino du Palais de la Méditerranée, quizás asesinada en Italia, uno de los grandes enigmas judiciales del siglo pasado en Francia.
«Nosotros realizamos una investigación preliminar cuyos resultados serán comunicados a la fiscalía local», declaró a la agencia AFP el capitán Silvio De Luca, jefe de los carabineros de Cassino, al sur de Roma, donde Maurice Agnelet, un abogado que actualmente tiene 76 años, podría haber matado en 1977 a Agnès Le Roux, una de sus amantes, que en esa época tenía 29 años.
Maurice Agnelet es juzgado en estos momentos por tercera vez. Siempre clamó su inocencia en la desaparición en Niza (sudeste de Francia) el 30 de octubre de 1977 de Agnès Le Roux.
Su proceso comenzó el lunes pasado con una revelación de su hijo Guillaume. Este sostuvo que guardó silencio durante años sobre la «confesión» de su padre sobre el asesinato de Agnès Le Roux. Este miércoles confirmó ante el tribunal de Rennes sus declaraciones acusando a su padre de asesinato.
Agnelet fue condenado en su día a 20 años de prisión por el asesinato de Agnes Le Roux, pero el 31 de enero 2013 logró un tercer juicio después de que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos sentenciara en septiembre de 2011 que el proceso anterior no había sido válido, alegando que el acusado había tenido un «juicio injusto» y sin las garantías suficientes.