La ministra para Irlanda del Norte, Karen Bradley, ha anunciado que a partir de noviembre el salario de los parlamentarios norirlandeses pasará de 49.500 libras a 35.888, al tiempo que ha aclarado que la reducción se realizará en dos tramos de 7.425 y 6.187 respectivamente. Asimismo, según informa la BBC, Bradley ha descartado la convocatoria de elecciones anticipadas en el Úlster.
«La reducción tendrá efecto en dos fases, comenzando en noviembre», ha señalado ante la Cámara de los Comunes, aclarando que el recorte no afectará al personal que trabaja para los diputados. «No creo que deban sufrir por la incapacidad de los políticos de formar un ejecutivo», ha subrayado.
Por otra parte, ha adelantado que presentará un proyecto de ley para permitir que los funcionarios puedan tomar decisiones a falta de devolución de competencias por parte de Londres al Gobierno norirlandés.
«Ofrecerá mayor claridad y certeza para permitir a los departamentos de Irlanda del Norte seguir adoptando decisiones en el interés de los ciudadanos y garantizar la continuidad de los servicios públicos», ha explicado la ministra.
El Ejecutivo, uno de los pilares de los Acuerdos de Paz de 1998, quedó roto en enero de 2017 con la salida del Sinn Fein del mismo tras argumentar que sus socios del DUP no les estaban tratando como iguales. Los esfuerzos y llamamientos para que se forme un nuevo gobierno no han prosperado hasta ahora.
La líder del DUP y hasta enero de 2017 ministra principal, Arlene Foster, ha considerado como «un paso sensato» la decisión de recortar los salarios de los diputados norirlandeses ya que «no somos capaces de realizar nuestro pleno papel de legisladores».