Según las informaciones recogidas por el diario local ‘The Times’, los aeropuertos buscan hacerse con tecnología para detectar y vigilar estos aparatos después de que el Ejército retirara sus capacidades de Gatwick esta semana.
Las Fuerzas Armadas fueron llamadas a participar como parte de la respuesta al caos en Gatwick, a raíz del cierre de su pista de aterrizaje el 19 de diciembre durante tres días, lo que afectó el viaje de 140.000 pasajeros.
Durante la jornada, el ministro de Transportes, Chris Grayling, se ha reunido con altos cargos de la Policía, los servicios de Defensa y la aviación para discutir qué lecciones se pueden aprender de lo sucedido.
De momento, la Policía sigue sin encontrar el aparato concreto que causó las interrupciones de cerca de mil vuelos. El aeropuerto, desde entonces, ha ido operando a marchas forzadas entre nuevos avistamientos que han dificultado todavía más labor de su personal.
La Policía británica no descarta que alguno de los aviones no tripulados avistados durante el caos navideño fuera propiedad, precisamente, de sus propias fuerzas de seguridad, según dijo el sábado el comisario jefe de la Policía de Sussex, Giles York.
Mientras, el aeropuerto ha ofrecido una recompensa de unos 55.000 euros a cambio de información que lleve al arresto de los responsables. Una pareja fue detenida y posteriormente liberada sin cargos, entre las disculpas de la Policía.