Los 43 estudiantes desaparecidos hace más de un mes en Guerrero podrían estar vivos. Según explicó Rogelio Ortega, gobernador interino de Guerrero, en una entrevista que mantuvo con el diario El Milenio, los compañeros de clase de los estudiantes desaparecidos le dijeron que los estudiantes están vivos.
«Hay indicios de que pueden estar vivos. Los propios estudiantes de Ayotzinapa me han dicho que siguen con vida”, dijo el gobernador interino.
Ortega aseguró que el grupo de los estudiantes se dividió en dos aquella trágica noche y que uno de los grupos se dirigió a la sierra de Guerrero.
«Son indicios, pero sí hay una alta probabilidad de que estén vivos, yo confío en ello«, insistió sin facilitar más detalles respecto a cómo obtuvieron esta información los compañeros de los desaparecidos.
Contradicciones
Por su parte, el director de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) de México, Tomás Zerón de Lucio, ha advertido de que no hay garantías de que los 43 »normalistas estén con vida.
«Hoy no podemos garantizar nada», ha dicho en una rueda de prensa celebrada en la sede de la Procuraduría General de la República (PGR), según ha informado el diario mexicano »El Proceso».
«Lo que sí se puede garantizar es que todo el estado de fuerza que está ubicado en Guerrero, está dedicado cien por cien, las 24 horas, a la búsqueda de las personas no localizadas», ha asegurado.
Zerón de Lucio ha detallado que en este mes de rastreo se han hecho 1.000 recorridos terrestres, 143 aéreos y 40 acuáticos en ríos cercanos para localizar a los jóvenes desaparecidos.
El funcionario mexicano ha recordado que hay 10.000 efectivos, de distintas instituciones federales, buscando a los 43 »normalistas», además de nueve helicópteros, cinco »drones» (aviones no tripulados), cuatro laboratorios móviles y georradares.
En la misma línea, el nuevo gobernador de Guerrero, Rogelio Ortega, instó el jueves a estar listos para «cualquier desenlace» en el caso Iguala, aunque en una entrevista televisiva apuntó que «podrían estar vivos».
UN MES SIN NOTICIAS
Los 43 »normalistas» desaparecieron entre el 26 y el 27 de septiembre en el marco de una protesta contra la reforma educativa del Gobierno mexicano que desembocó en violentos enfrentamientos con la Policía que se saldaron con seis muertos y 25 heridos.
La PGR ha confirmado que el Gobierno y la Policía de Iguala estaban confabulados con el »mini-cártel» Guerreros Unidos para hacer desaparecer a estos 43 »normalistas», por lo que las autoridades mexicanas intentan identificarlos entre los restos hallados en fosas comunes.
La PGR ha emitido órdenes de captura contra Abarca y su mujer, que están en paradero desconocido. También acusa de este crimen al jefe de sicarios »El Gil», así como al secretario de Seguridad Pública y al subjefe de la Policía municipal, Felipe Flores Velázquez y César Navas González.
La Procuraduría General de la República ha emitido órdenes de captura contra el alcalde de Iguala, José Luís Abarca, y su esposa, María de los Ángeles Pineda Villa, ambos prófugos desde que ocurrieron los hechos. Algunos testigos señalan que uno de ellos podría haber dado la orden de detener y reprimir a los estudiantes.
Pineda Villa, también conocida como la »Reina de Iguala», está presuntamente vinculada con Guerreros Unidos y con agentes policiales que también tienen contacto con el grupo criminal. Es más, muchas fuentes apuntan que es “la principal operadora” del cártel en Iguala.