«El Gobierno de España, junto con los de los otros 27 Estados Miembros de la Unión Europea, expresa su rechazo a esta medida injustificada», según la nota publicada este sábado por el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación.
La Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la Unión Europea, Federica Mogherini, tildó ayer de «arbitraria» y «contraproducente» la decisión.
«Nada puede justificar este acto arbitrario», dijo Mogherini en un comunicado, en el que ha respondido al argumento de Kinshasa sobre la «reciprocidad», recordando que «las medidas están relacionadas con violaciones de los Derechos Humanos y los obstáculos creados a una salida pacífica a la crisis» en la que actualmente se encuentra el país africano, y que espera solucionar en las elecciones de este domingo.
Los ministros de Asuntos Exteriores de la UE aprobaron el 10 de diciembre extender un año más, hasta el 12 de diciembre de 2019, las sanciones contra 14 altos cargos políticos y de las fuerzas de seguridad en RDC por obstruir el proceso electoral y violaciones de los Derechos Humanos sobre el terreno.
La tensión ha ido en aumento en RDC a medida que se aproximaban las elecciones, que se espera culminen con el primer traspaso de poderes democrático en el país. El mandato del presidente Saliente, Joseph Kabila, finalizó en diciembre de 2016, pero se ha visto prorrogado ante la falta de comicios.