Los militares sirios han informado a los rebeldes de que, si dejan las armas, se les concederá un paso seguro para abandonar la ciudad.
«Los líderes de los ejércitos de Siria y Rusia garantizan una salida segura a los insurgentes y se comprometen a proporcionarles la asistencia necesaria», según la nota recogida por la agencia oficial de noticias siria, SANA.