La portavoz del Pentágono, Sheryll Klinkel, ha detallado que el suceso tuvo lugar el 6 de diciembre en la región del lago Chad y ha indicado quelos milicianos serían miembros de la rama del grupo yihadista Estado Islámico en la región.
«Nuestras fuerzas operan en zonas inestables y ocasionalmente se ven expuestas al peligro por parte de fuerzas enemigas», ha manifestado, según ha recogido la cadena de televisión estadounidense CNN.
El incidente tuvo menos de dos meses después de la muerte de cuatro de las Fuerzas Especiales estadounidenses y cuatro soldados nigerinos a causa de un ataque –cuya autoría fue reclamada por Estado Islámico– contra una patrulla conjunta en la localidad de Tongo Tongo, cerca de la frontera con Malí.
La emboscada supuso las primeras bajas en combate de Estados Unidos en Níger y abrió un debate sobre el papel encubierto de Washington en las operaciones contra el yihadismo a nivel internacional.