El Gobierno de Ucrania asegura que la situación en la capital del país está bajo control, después de que hoy se produjeran violentos enfrentamientos junto a la sede del complejo gubernamental en los que, según la policía, un centenar de agentes resultaron heridos.
El portavoz del Ejecutivo ucraniano, Vitali Lukianenko, respondió con un enfático «Sí, desde luego», al ser preguntado por la agencia Interfax-Ukrainy si las autoridades controlan la situación en Kiev.
Los agentes antidisturbios consiguieron rechazar a los manifestantes que por segunda vez en el día de hoy intentaron romper el cordón policía que protege el complejo gubernamental, situado a escasos centenares de metros de la Plaza de la Independencia, donde la oposición celebra un mitin multitudinario.
La policía, según imágenes de vídeo difundidas en internet, consiguió arrebatar a los manifestantes una excavadora con la que en dos ocasiones intentaron abrirse paso hacia el complejo gubernamental.
El jefe del grupo parlamentario del partido opositor Batkivschina, Arseni Yatseniuk, advirtió al presidente de Ucrania, Víctor Yanukóvich, contra el uso de la fuerza contra quienes se manifiestan pacíficamente en la capital.
«Ninguno de los participantes en la acción de protesta pacífica ha intentado asaltar la guarida de Yanukóvich», dijo Yatseniuk, quien recalcó que la oposición actúa estrictamente en el marco de la ley.
Además, el dirigente opositor pidió a la policía que actúe contra los provocadores.
Según los partidos opositores, en la Plaza de la Independencia se ha congregado hasta medio millón de personas para exigir la dimisión de Yanukóvich y de su Gobierno, que encabeza Nikolai Azárov.
El Ministerio del Interior de Ucrania cifró en unos 150.000 los participantes en la manifestación para protestar por la decisión de Yanukóvich de renunciar temporalmente a la firma del Acuerdo de Asociación con la Unión Europea.
EL PRESIDENTE, REUNIDO DE URGENCIA
El presidente de Ucrania, Víctor Yanukóvich, se ha reunido con sus más cercanos colaboradores en las afueras de Kiev para estudiar la posibilidad de decretar el estado de excepción ante los disturbios en la capital, informaron fuentes gubernamentales.
«Se está estudiando qué hacer. Es muy probable que a partir de mañana se decrete el estado de excepción, pero es algo que aún no se ha decidido», dijo una fuente del Ejecutivo citada por RBK-Ukraini.
100 POLICÍAS HERIDOS
Unos 100 policías resultaron heridos en enfrentamientos que tuvieron lugar este domingo durante la manifestación favorable a la Unión Europea en Kiev, indicó la policía a la AFP.
«Alrededor de 100 policías resultaron heridos en las protestas de Kiev», afirmó la portavoz policial Olga Bilik por teléfono.
La AFP vio a las fuerzas de seguridad delante del edificio presidencial lanzando granadas de concusión y de humo a unas decenas de manifestantes enmascarados, que les estaban arrojando piedras de gran tamaño, así como lo que los medios de comunicación ucranianos calificaron de cócteles molotov.
Dos fotógrafos de la AFP y un camarógrafo local que trabaja para la televisión Euronews, con sede en Lyon (centro-este de Francia), resultaron levemente heridos en los choques.
EL JEFE DE LA POLICÍA DIMITE
El jefe de la Policía de Kiev, Valeriy Koryak, ha presentado su dimisión tras denunciar el «uso excesivo de la fuerza» de los agentes contra los manifestantes de la oposición que exigen la firma del acuerdo de asociación negociado ya entre la UE y el Gobierno ucraniano, según informa la cadena estadounidense CNN.
MILES DE INDIGNADOS
Decenas de miles de manifestantes favorables a la Unión Europea salieron este domingo a las calles del centro de Kiev, a pesar de la prohibición de las autoridades, y pidieron la dimisión del presidente Viktor Yanukovich.
«¡Revolución! ¡Qué vergüenza! ¡Ucrania es Europa!», gritaban los manifestantes, esgrimiendo banderas ucranianas y de países de la UE y gritando lemas contra Yanukovich, que el viernes renunció a firmar un acuerdo con la Unión Europea. La vecina y poderosa Rusia se oponía a este acuerdo.
Tras salir de un lugar cercano a un monumento a Taras Shevchenko, poeta y héroe nacional, los manifestantes retiraron las barreras de seguridad metálicas instaladas por la policía y se dirigieron hacia la plaza de la Independencia, el lugar emblemático de la «revolución naranja» de 2004, de donde el sábado ya habían sido desalojado violentamente .
La oposición convocó esta manifestación a pesar de la prohibición expresa de las autoridades.
«Las concentraciones masivas están prohibidas hasta el 7 de enero de 2014» en la plaza de la Independencia, lugar tradicional de las manifestaciones en Kiev, así como en las calles donde hay edificios presidenciales, la calle del Parlamento y la de la sede del gobierno, dijo a la AFP la abogada Evguenia Zakrevskaia, citando una decisión de la justicia ucraniana tomada la madrugada del domingo.
La oposición, que critica al presidente por haberse alejado de Europa y haber endurecido su régimen, consiguió movilizar la semana pasada a miles de personas.
La manifestación de este domingo es un test de la capacidad de movilización de los opositores, en un ambiente tenso después de que el sábado la policía dispersó por la fuerza a manifestantes que ocupaban la plaza de la Independencia.
A pesar de ello, el dirigente del partido opositor Oudar y campeón de boxeo Vitali Klitschko mantuvo la convocatoria.
«Sólo si estamos juntos podremos cambiar la situación del país. Por eso hay que salir a la calle y dar nuestra opinión de manera pacífica», dijo Klitschko en un comunicado de su partido.
En una carta leída el sábado por su hija Evguenia, la opositora encarcelada y ex primera ministra Yulia Timoshenko también pidió derrocar al gobierno.
«No abandonéis la calle hasta que el régimen no haya sido derrocado por medios pacíficos», dijo Timoshenko, que cumple una pena de siete años de prisión y cuya liberación reclama la UE.
El sábado por la noche unas 10.000 personas se manifestaron en Kiev en la plaza Mijailovskoe, cerca de la plaza de la Independencia, según una estimación de la AFP.
Durante toda la noche sonaron bocinas en la ciudad y se veía a conductores con banderas ucranianas y europeas. Unas 500 personas pasaron la noche en la plaza Mijailovskoe calentándonse con braseros.
El sábado por la mañana la policía antidisturbios había desalojado con porras a unos mil manifestantes que estaban en la plaza de la Independencia. Treinta personas resultaron heridas.
Los manifestantes denuncian el giro de Yanukovich, que el viernes no quiso firmar un acuerdo de asociación con la Unión Europea que llevaba meses gestándose, y lo acusan de poner el país en manos de Rusia.
Este domingo el primer ministro ucraniano, Mykola Azarov, anunció que Yanukovich viajará a Rusia en los próximos meses, a pesar de que el presidente reafirmó su voluntad de acercarse a la UE.
«Haré todo lo posible para acelerar el proceso de acercamiento de Ucrania con la Unión Europea para evitar pérdidas importantes para nuestra economía y el deterioro de nuestro nivel de vida», dijo en un comunicado, en el que también lamentó los enfrentamientos en Kiev.
Putin quiere una nueva URSS
Rusia advirtió a Ucrania, que se encuentra en una situación económica difícil, sobre las posibles consecuencias comerciales si firmaba el acuerdo de asociación con los Veintiocho, sugiriendo la posibilidad de una cooperación económica que les reportaría miles de millones de dólares.
Por otro lado, los últimos movimientos en política exterior han servido a Rusia para apuntarse varios puntos en relaciones internacionales que frenan la hegemonía de EEUU en Oriente Medio. Ahora, le toca el turno a Europa. Si Rusia frena la firma del tratado de asociación se apuntaría un punto a la par que desde el punto de vista geográfico, si Rusia controlase Ucrania, contaría con una mayor población y soberanía en la región, quele garantizaría un mayor estatus mundial. Además, contaría con un territorio fértil y con salida al mar negro.
¿Qué papel juega Yulia Timoshenko?
Natalia Shapovalova investigadora asociada en FRIDE también analiza la influencia de la expresidenta Yulia Timoshenko en las protestas. Considera que representa a los partidarios de la firma del Acuerdo de Asociación con la Unión Europea pero no canaliza la opinión de toda la oposición dado que son muchos los manifestantes en las calles de Kiev que no quieren su liberación. En este sentido, explica que su influencia es mayor fuera de Ucrania que en dentro del país. No lidera la oposición pero sigue en huelga de hambre.
A medida que el Estado ha perdido su papel como país de tránsito y su economía es cada vez más ineficiente, Ucrania debe tomar una difícil decisión y escoger entre las garantías de seguridad energética de la UE o de Rusia y parece, que Putin se lleva el primer asalto, a pesar de que
solo el 14 por ciento de ucranianos quiere adhiriese a la Unión Aduanera.