El Instituto para la Gestión de Propiedades Estatales (IGEPE) ha indicado que la decisión ha sido adoptada tras una reunión para analizar la crisis financiera en la aerolínea.
En este sentido, ha explicado que la falta de fondos de la empresa ha llevado a los proveedores a pedir pagos por adelantado por el combustible y, al no poder hacer frente a los mismos, la aerolínea tuvo que cancelar el miércoles la práctica totalidad de sus vuelos, dejando a 300 pasajeros en tierra.
LAM ha reconocido además que tuvo que cancelar vuelos también durante la jornada del jueves debido a su incapacidad para garantizar el suficiente combustible, según ha recogido la agencia estatal mozambiqueña de noticias, AIM.
El ministro de Transportes del país africano, Carlos Mesquita, reconoció el mismo jueves la existencia de problemas de gestión y apuntó que eso había llevado a problemas de impagos con los administradores.
La aerolínea estuvo sometida durante seis años a una prohibición de operaciones en la Unión Europea (UE), medida impuesta por la falta de supervisión a la compañía por parte de las autoridades de aviación mozambiqueñas y que fue retirada el año pasado.