El nuevo programa extenderá Har Homa hacia el sur y el este hacia Beiy Sahour. La directora del grupo de Derechos Humanos israelí Ir Amim, Judith Oppenheimer, ha señalado que la construcción hará permanente la separación entre Belén y Jerusalén.
El portavoz de la presidencia de la Autoridad Palestina, Nabul Abu Rudeineh, ha señalado que la decisión «no anima a retomar las negociaciones», según ha informado la agencia oficial de noticias palestina, WAFA.
Asimismo, ha pedido a la comunidad internacional, y al Cuarteto para Oriente Próximo –compuesto por Naciones Unidas, la Unión Europea, Rusia y Estados Unidos– en particular, que detengan la construcción de asentamientos en interés de la paz.
La última ronda de negociaciones de paz directas se canceló en septiembre de 2010 después de que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, se saliera de la mesa de forma unilateral tras negarse a extender el periodo de construcción de asentamientos, una de las condiciones fundamentales para las negociaciones.
El Derecho Internacional considera ilegales los asentamientos israelíes. Israel lo niega y ha prometido mantener los principales bloques de asentamientos en cualquier acuerdo de paz que firme con la Autoridad Palestina.