Abe iba a convertirse en el primer dirigente japonés en visitar el país centroasiático desde Takeo Fukuda en 1978 y las autoridades estaban realizando preparativos para que su viaje tuviera lugar a mediados de julio.
La decisión ha tenido lugar en medio de las reclamaciones estadounidenses a Tokio y otros aliados para que pongan fin a la importación de crudo iraní y ante los esfuerzos de Washington para aislar a Irán.
Las fuentes citadas por Kiodo han resaltado que Tokio, que mantiene relaciones estables con Teherán, ha comunicado al Gobierno estadounidense que no puede reducir aún más las importaciones.
El presidente estadounidense, Donald Trump, anunció en mayo la retirada de Washington del acuerdo nuclear firmado en 2015. Desde entonces, el resto de firmantes trabaja para mantenerlo en vigor.