Los madrileños consumirán más de 330.000 kilos de dulces tradicionales de Todos los Santos como son los buñuelos, huesitos de santo y empiñonados y almendrados.
Esas son las previsiones de la Asociación de Empresarios Artesanos del sector de la Pastelería de Madrid (Asempas), y que señalan que, una vez más, los buñuelos de viento serán los dulces más demandados por madrileños y visitantes, que consumirán alrededor de 260.000 kilos.
Además, también se estima la venta de unos 65.000 kilos de huesos de santo y en torno a 6.500 de empiñonados y almendrados.
Los buñuelos, el producto estrella de la Festividad de Todos los Santos, se empezaron a consumir en palacios y conventos durante la Edad Media, y de ahí pasaron a elaborarse en casas particulares. Finalmente, y a día de hoy, son los obradores de las pastelerías los que se han especializado en la elaboración de estos dulces tan típicos.
Por su parte, los huesos de santo, empiñonados y almendrados son de origen árabe, como lo demuestra su composición a base de almendras, miel y azúcar.