«Después de varias reuniones entre altos mandatarios de QPR y Chelsea con la FA, se llegó a la conclusión de que lo mejor era eliminar el apretón de manos habitual en el Loftus Road. La FA atendió a la petición de ambos equipos y, con la intención de eliminar posibles tensiones previas al partido, se decidió eliminar este gesto», explicó la FA en un comunicado oficial.
Terry, quien siempre ha defendido su inocencia, deberá compadecer este próximo miércoles 1 de febrero ante el Tribunal de Magistrados de Londres, en un juicio en donde se enfrenta a una posible multa de hasta 2.500 libras (3.000 euros).
Este no es el único caso de racismo en esta temporada en Inglaterra. El capitán del Chelsea podría unirse a Luis Suárez, quien ya fuera suspendido ocho partidos y multado con 40.000 libras (48.000 euros) por la Asociación de Fútbol inglesa por insultar al defensa del Manchester United Patrice Evra.