El entrenador del Athletic de Bilbao, José Ángel Ziganda, reconoció hoy tras derrotar al Spartak Moscú (1-3) en la ida de los dieciseisavos de final de la Liga Europa que tanto el club como el equipo necesitaban «un partido así».
«El club, el equipo necesitaba un partido así. Estamos entrenando bien. Sabía que algún día podía pasar», dijo Ziganda en rueda de prensa en el estadio Otkritie Arena.
Ziganda destacó que el equipo salió enchufado desde el primer minuto y tras aguantar «el primer arreón» del Spartak demostró una gran personalidad al aprovechar las ocasiones de gol.
«El resultado es el que queríamos fuera de casa. Queríamos hacer un gol y ganar, y fuimos capaces de marcar tres goles. Sabíamos que íbamos a tener opciones. Tiene mérito ganar. Ganar fuera de casa en Europa es difícil», apuntó.
El técnico destacó que la «gente experimentada» como Adúriz y Raúl García aparecieran el momento indicado, especialmente el primero, que marcó dos goles a sus 37 años.
«Es un lujazo entrenarle. Sólo estando en el campo ya impone. Sabemos que cuando lo necesitas es garantía de gol. Es un ejemplo tanto dentro como fuera del campo», señaló.
También alabó el trabajo realizado por la defensa, que maniató a los delanteros del equipo moscovita, especialmente al holandés Promes y al brasileño Luis Adriano.
«La línea defensiva ha estado a un nivel altísimo. Yeray ha hecho un partidazo, ha estado espectacular», destacó.
Con todo, llamó a no confiarse con vistas al partido de vuelta en San Mames, ya que apuntó que el Spartak, si le dejas, «puede jugar muy bien» y que «del centro del campo en adelante son muy buenos».
«Ahora hay que darle continuidad. No nos podemos despistar para nada el jueves que viene. Ni una confianza. Cuando ganas, parece que todo viene rodado, pero el fútbol es de momentos. Jugamos en casa y tenemos un buen resultado, pero ni una relajación», advirtió.
El «Cuco» Ziganda llamó a centrarse en el «partidazo» del fin de semana ante el Atlético de Madrid en el Wanda Metropolitano y reconoció que el resultado de hoy será positivo para el entorno, el club y el equipo.
«La tranquilidad es buena para todos. Es algo bueno. Pero no hay mucho tiempo para pensar. No hay tregua», afirmó sobre las críticas recibidas en las últimas semanas por prensa y afición.