«Lo mejor es que gracias al trámite parlamentario hemos conseguido mejorar sustancialmente respecto al proyecto original, sobre todo en lo que respecta a la protección de los ciudadanos», ha destacado en declaraciones a los medios en los pasillos del Congreso, tras asistir al último debate de esta iniciativa antes de su remisión al Senado.
Así, ha destacado la eliminación de las cláusulas suelo, la reducción de los intereses de demora, el aumento de los plazos para ejecutar una hipoteca, o la extensión del código de buenas prácticas para facilitar instrumentos, como las quitas, las renegociaciones o la dación en pago en determinadas ejecuciones.
«Creo que todos debemos estar satisfechos con el buen trabajo que se ha realizado en la Cámara en este ámbito», ha apostillado, defendiendo que, pese a que «siempre se puede ir más allá», el texto acordado «es ambicioso».
Por último, ha recordado que el texto se deriva de una trasposición pendiente de incorporar a la legislación española, con años de retraso, y que por ello sobre España pende una amenaza de sanción de más de 100.000 euros al día por parte de la Comisión Europea.