Poco importa que los líderes europeos finalizaran esta mañana, al filo de las seis de la mañana, una dura jornada de trabajo. Con un par de horas de retraso según lo previsto, Croacia ha firmado su adhesión a la Unión Europea, y todo el mundo a excepción del Presidente francés Nicolas Sarkozy, ha estado allí para »certificar» el acontecimiento.
De nuevo hoy promete ser una larga jornada de trabajo para el Consejo Europeo, aunque con menos escollos que los encontrados durante las negociaciones aunque con menos escollos en las negociaciones.
En la orden del día están los detalles del pacto fiscal al que sí han llegado los 27; la política energética común, la ampliación de la Unión Europea y la libre circulación según el Tratado de Schengen para ciudadanos de Rumanía y Bulgaria; para terminar debatiendo sobre una posición común frente a Irán.
Los jefes de Gobierno de la Unión Europea deberían aprobar nuevas sanciones contra el país persa debido a su programa nuclear. Los socios de la Unión Europea están divididos en cuanto a qué sanciones adoptar contra Irán.
Francia aboga por embargar las importaciones de petroleo iraní, una opción con la que tampoco están de acuerdo todos los socios.
Las decisión que tome hoy el Consejo Europeo con respecto a Irán se trasladará, para ser adoptada, en el próximo Consejo de Ministros de Exteriores del próximo año.