El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha informado de que viajará hoy mismo a Ceuta ante la crisis humanitaria que ha llevado a 6000 personas a llegar de manera irregular a España en las últimas horas, muchas de ellas a nado y una gran parte niños.
Según ha explicado, actuará con «firmeza» ante la «súbita llegada de migrantes irregulares» procedentes de marruecos antes la «grave crisis» en la que se ven inmersos. Además, ha pedido al país vecino «respeto a las fronteras» y cooperación.
Además, durante una declaración institucional sin preguntas tras el Consejo de Ministros, ha asegurado que actuará con «todos los medios necesarios» para «defender la integridad territorial de España». Por otro lado, el Gobierno ha informado de 2.700 devoluciones y asegura que garantizarán el control de fronteras.
Sánchez no ha querido referirse a la cogida del líder del Frente Polisario que desencadenó una crisis diplomática como la causante de la llegada de miles de personas. Fernando Grande-Marlaska, ya había advertido anteriormente de que tratar en un hospital español a Brahim Ghali podría tener consecuencias.
Agentes de la Policía y la Guardia Civil han llegado desde la península. Además, el conflicto ha obligado a desplegar al Ejército en Ceuta.
«La integridad territorial de España, sus fronteras, que son también las fronteras exterior de la UE, serán defendidas por el Gobierno de España ante cualquier desafío y conjuntamente con nuestros socios europeos», ha sentenciado Sánchez.