El director de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios (OHSJD), Jose María Viadero, ha asegurado hoy que esta organización «asumirá los gastos y responsabilidades que tenga que asumir» respecto a las repatriaciones del religioso Miguel Pajares y de la monja Juliana Bonoha Bohé.
En rueda de prensa, ha señalado además que, hasta el momento, esta organización no ha recibido ningún requerimiento económico por parte del Ministerio de Sanidad. No obstante, ha considerado que una repatriación con las características de la del religioso, infectado de ébola en Liberia «no es una repatriación al uso».
Del mismo modo, asegura que la única prioridad de la Orden es abrir el hospital de Monrovia (Liberia) donde se encuentran las otras dos hermanas de la Orden la Inmaculada Concepción, también infectadas de Ébola, y el enfermero camerunés que las está cuidando. “En este momento, nuestra única prioridad es la gente que se ha quedado en Liberia. Por eso vamos a desplegar un dispositivo de ayuda, en colaboración con entidades locales, para hacer frente al virus y ayudar a la población infectada”, subrayó Viadero.
Además, se ha mostrado contento de que Pajares y la religiosa Juliana Bonoha Bohé estén siendo «bien atendidos» y ha señalado que «por expreso deseo de los pacientes no se hará público su estado de salud».
En este sentido, se muestra agradecido a la labor que ha realizado el Gobierno en todo momento, ya que, tanto la ministra Ana Mato como el presidente Mariano Rajoy “han seguido de cerca todos los trabajos que se han realizado”.
HOSPITAL DE LIBERIA
Por este motivo, Viadero expresa su deseo de “dejar atrás cuanto antes el debate sobre los costes de la repatriación”, y centrarse en lo que “es más importante, abrir el hospital de Monrovia y buscar una solución para los religiosos que se han quedado en Liberia”.
Por ello, ha dejado claro que “los hermanos que están en Monrovia tienen todos los cuidados necesarios. Otra cosa es que se sientan solos. De ahora en adelante, nuestra única prioridad es abrir el hospital de Saint Joseph, ya que todos los centros hospitalarios en Liberia están actualmente cerrados”.
Por otra parte, Viadero confesó que “a la Orden le hubiera gustado que regresaran todos los que se encuentran en Liberia, aunque tenemos que aceptar lo que el Gobierno ha decidido”, y dijo que espera que la declaración del virus como de emergencia de salud internacional por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS) “sirva para que todos los actores de la comunidad internacional implicados se pongan las pilas para luchar contra el Ébola».