Los Pujol han decidido pasar al contratataque, después de que hace apenas 25 días, el ex presidente de la Generalitat de Catalunya, Jordi Pujol, reconociese que había mantenido ocultos en Suiza durante 34 años el dinero procedente de una herencia y que se empezasen a conocer los negocios y el dinero oculto de la familia en paraísos fiscales.
Tras admitir el escándalo, pedir perdón y asegurar estar dispuesto a responder ante Hacienda y los jueces, ahora Pujol está decidido a intentar anular el proceso por defectos en la instrucción, pese a que en el transcurso de esta se hayan acreditado algo más que indicios, según aseguraba ayer El Periódico de Catalunya.
Esta es exactamente la misma estrategia que siguó en el caso Naseiro -centrado en la financiación ilegal del PP y que fue anulado por unas escuchas ilegales- o en el caso Casinos, que acreditó financiación irregular de Convergència pero después de una interminable instrucción y sin que se pudiera vincular los hechos a delito alguno.
Ahora, la familia del expresident busca anular el proceso por basarse en un chivatazo ilegal y por carecer de pruebas. Con este objetivo, ha presentado una querella a última hora de la tarde contra los bancos andorranos Banca Privada d»Andorra y Andbank por revelación de secreto sobre las cuentas de la familia en ese país, basándose en que supuestamente un exempleado de estas entidades reveló los datos. Si prosperase la querella, se podría retrasar e incluso anular el proceso.
Además, recurrirá contra la comisión rogatoria cursada por el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz a Andorra para disponer de información sobre los datos bancarios de la familia en estas entidades. El magistrado ha citado el 15 de septiembre a Jordi Pujol Ferrusola y a su esposa presunto delito fiscal y blanqueo. Investiga 118 movimientos de tráfico de divisas efectuados por el primogénito de los Pujol durante 8 años. En total, 32,4 millones de euros, y el juez trata de saber quienes fueron los beneficiarios.
Según reveló ayer el Diari d»Andorra, el recurso que han preparado los abogados de la familia Pujol, encabezados por el penalista Cristóbal Martell, alega que el juez actúa sin disponer de indicios suficientes que avalen la petición de información que ha cursado sobre las cuentas del primogénito del expresident, Jordi Pujol Ferrusola y su exmujer Mercè Gironès.
Pero la familia va más allá y ha decidido atacar al juez por actuar con finalidades políticas para debilitar el proceso soberanista. Entre otras consideraciones, basará su argumento en que quien se ha personado como acusacación particular en la causa es la organización ultraderechista Manos Limpias.
Y alegará que el juez Ruz no ha decidido pedir información a Andorra hasta que el diario El Mundo publicó los datos de movimientos de cuentas de los Pujol en la banca del país vecino.
Persecución política
Pujol asegura que sufre una persecución política, pese a que nadie, incluso en su partido ni en la Generalitat, ha hecho una lectura parecida. La actitud que ha tomado ahora Pujol ha sido tachada de «indecente» por el coordinador de ICV, Joan Herrera, que calificó se refirió al asunto como un «espectáculo insólito», al tiempo que reclamó, como también lo ha hecho Esquerra Republicana de Catalunya, que de explicaciones en el Parlament.