Según informan desde Moncloa, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha reclamado a la Unión Europea y a los países africanos ribereños del Mediterráneo un esfuerzo «estructural y a largo plazo» de cooperación que permita «la adopción de un enfoque global del fenómeno migratorio, en el que todas las acciones que se lleven a cabo formen parte de un todo», como mejor modelo de prevención y lucha contra las redes de tráfico de migrantes que operan tanto en este mar como en el océano Atlántico.
Grande-Marlaska ha participado en una reunión telemática con sus homólogos de Francia, Alemania, Italia y Malta, así como los de Marruecos, Argelia, Libia, Mauritania y Túnez, en la que también han intervenido los comisarios europeos de Asuntos Interiores, Ylva Johansson, y de Vecindad y Ampliación, Olivér Várhelyi.
El ministro español ha defendido que «la clave es siempre la construcción de una relación de confianza, franca y sincera entre iguales, con nuestros socios y amigos de norte de África y África subsahariana». Y ha apoyado sus palabras en «la excelente relación de cooperación que España mantiene con los principales países de origen y tránsito, construida a lo largo del tiempo y que seguimos trabajando al máximo nivel para que perdure».
«Los contactos continuos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y el trabajo operativo conjunto, el desarrollo de proyectos concretos en países de origen y tránsito, el refuerzo de sus capacidades y el intercambio de información son algunos de los elementos que nos permiten impedir las actividades de las redes de tráfico de personas, ha explicado el ministro, que en su intervención ha agradecido la colaboración que con este objetivo España recibe de los países africanos del Mediterráneo», explican en el comunicado.