Joaquín Villalón Díez es otro de los asesinos que podría salir en los próximos días de prisión después de que Estrasburgo tumbara la doctrina Parot. Apodado como »el asesino señorito» es uno de los criminales más retorcidos que ha dado la crónica negra española de los últimos tiempos. Condenado a 52 años de cárcel, se le aplicó la doctrina Parot. Su carrera criminal comenzó en 1981, cuando asesinó, descuartizó y abandonó en un monte a su amante, Paquita García.
El cadáver fue encontrado por unos niños, y en aquella ocasión Villalón fue condenado a 17 años de cárcel. El asesino tenía 25 años, igual que la joven, a la que había ocultado que estaba casado y que tenía dos hijos, y a la que había prometido matrimonio después de que ésta quedara embarazada.
Los restos de Paquita fueron encontrados repartidos en cinco bolsas. La investigación determinó, tal y como recoge la edición de ABC del 4 de agosto de 1981, que Joaquín había matado por estrangulamiento a Paquita en el transcurso de una discusión y que posteriormente había trasladado su cadáver hasta un taller donde la descuartizó con una sierra mecánica.
Dos transexuales en Madrid
Diez años después de su condena, una noche de septiembre de 1992, los bomberos de Madrid entran en un piso y hallan el cadáver de José C.R.. Estaba en el baño, con una cadena atada al tórax, inconsciente y envuelto en llamas. Los vecinos habían alertado del incendio. José, un transexual conocido como Carmen, murió cuatro meses después.
Días después de hallar a José, la Policía encuentra muerto en su casa, también de Madrid, a Juan Manuel M.S., otro transexual conocido como Joanna, Había sido ahogado en la bañera después de recibir una brutal paliza.
Las investigaciones policiales llevaron a la detención de Joaquín Villalón, que en el momento de los hechos se encontraba de permiso mientras cumplía condena por la muerte de su amante.