El ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo, reconoció este martes en el Senado que “todavía queda mucho por hacer” para garantizar la inclusión del alumnado con discapacidad auditiva, pero incidió en que “es una tarea de todos”, en referencia a que las competencias en educación están transferidas a las comunidades autónomas.
Méndez de Vigo se expresó en estos términos en su respuesta a la senadora del Grupo Parlamentario de Unidos Podemos–En Comú Podem–En Marea Pilar Lima que le interpeló para conocer la valoración que hace el Ejecutivo acerca de la falta de acceso a los institutos de Secundaria por parte del alumnado sordo signante, usuarios de la lengua de signos, al inicio del presente curso.
“Es una tarea de todos, pero es cierto que todavía queda mucho por hacer”, reconoció el ministro, que agradeció a la senadora su intervención, puesto que es usuaria de lengua de signos, y calificó de “muy importante” la labor de sensibilización que realiza con sus intervenciones. “La inclusión es una batalla que hay que dar hasta el final y que no habremos ganado hasta que todo el mundo esté plenamente integrado”, añadió.
Respecto de las competencias educativas, Méndez de Vigo detalló que “el presupuesto de Educación de 2017 que tiene atribuido las comunidades autónomas es de 47.883 millones de euros”, por solo “2.353 millones que tiene el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte”, lo cual, señaló de “muy importante” a la hora de “ver cuáles son las responsabilidades” de cada uno.
En esta línea, sobre los territorios en los que tiene competencia el Ministerio (Ceuta y Melilla), el ministro aseguró que “no consta que haya casos de alumnos que no hayan podido acceder a institutos de Secundaria por razón de discapacidad” y además “tampoco ha llegado alguna reclamación” por parte de los gobiernos autonómicos.
Por último, en relación a la inclusión del alumnado con discapacidad, Méndez de Vigo manifestó que, según los datos correspondientes al curso escolar 2015/2016, “el 83% del alumnado con necesidades educativas especiales está integrado en centros ordinarios” y en los casos del alumnado con discapacidad auditiva, este porcentaje aumenta hasta el “94,1%”.
UN DÍA CON TAPONES
Lima, por su parte, explicó que si una persona usuaria de la lengua de signos no cuenta con una intérprete podría conseguir el 25% de la información gracias a la lectura labial, otro 50% del contexto y en cuanto al 25% restante, esta senadora indicó que comprenderlo será “cuestión de suerte”.
En este sentido, pidió al ministro que entienda las dificultades a las que se enfrenta el alumnado usuario de lengua de signos si no cuentan con un intérprete y le pidió que se imaginase “haber estudiado la carrera de Derecho con estas trabas”, que son “el día a día de las personas sordas en este país”.
“Solo quiero que quede patente que si no se cubren los casos al 100% estamos hablando de fracaso evitable y eso se soluciona con voluntad política, inversión y con una financiación autonómica justa”, remarcó la senadora que le lanzó el reto a Méndez de Vigo de acudir a un Consejo de Ministros o un Pleno con tapones en los oídos que le impidan escuchar nada para experimentar lo que se siente.
Ante esto, el ministro bromeó diciendo que lo hará para evitar escuchar los abucheos de los parlamentarios de su grupo, aunque acabó admitiendo que lo hará en un futuro, porque “me interesa ver cómo se siente uno”.