Ciudadanos escala puestos en la intención de voto y esas buenas previsiones recogidas por el CIS ha hecho que el propio líder de la formación naranja se crezca. En una bronca sesión de control, Albert Rivera ha pedido explicaciones a Rajoy por no recurrir al Tribunal Constitucional la delegación de voto de los dos «prófugos» soberanistas, Carles Puigdemont y Toni Comín, y ha amenazado con retirar su apoyo al 155. En el tira y afloja, el jefe del Ejecutivo, por su parte, le ha acusado de «aprovechategui» por buscar rédito electoral.
La respuesta del PP ante el anuncio del presidente de Ciudadanos no se ha hecho esperar y la ha calificado de «pataleta infantil». El coordinador general del PP, Fernando Martínez Maillo, ha recordado que el Gobierno ha presentado 25 recursos de inconstitucionalidad contra leyes impulsadas por las formaciones independentistas y que esa acción ha impedido que Carles Puigdemont lograra su objetivo de volver a ser elegido presidente de la Generalitat. También el portavoz del Grupo Popular, Rafael Hernando, se ha mostrado «perplejo» con la actitud de Rivera, a quien ha pedido que no tenga «reacciones infantiloides».
Albert Rivera ha dado por roto el acuerdo con el Gobierno de Mariano Rajoy para la aplicación del artículo 155 de la Constitución porque considera que «cada vez hay más pruebas» de que ha hecho «dejación de funciones» en Cataluña. «Hasta aquí hemos llegado con esta posición displicente. No vamos a seguir apoyando al Gobierno en esto», ha aseverado Rivera, incidiendo en que «no puede ser que el Gobierno mire hacia otro lado».
A diferencia de los recursos de los grupos parlamentarios, el recurso de inconstitucionalidad del Gobierno permitiría dejar en suspenso el voto delegado de los dos diputados electos y, por ende, daría al traste con la investidura de un nuevo candidato. «Si yo fuera presidente, intentaría hasta el último resquicio evitar el voto de un huido de la justicia», ha hecho hincapié Rivera.
El líder naranja ha remarcado que «todo» lo que el Gobierno ha hecho en Cataluña lo ha hecho «de la mano de Ciudadanos», que es, a su entender, el partido que tiene «más autoridad moral» para pedir «responsabilidad» al Ejecutivo . «No estoy de acuerdo con lo que (el Gobierno) está haciendo», ha insistido Rivera, para añadir que los catalanes no separatistas y los españoles en su conjunto «merecen un respeto», que pasa, según ha indicado, por «controlar» el dinero público, tratar de evitar «hasta el último resquicio» el «fraude de voto» de Puigdemont y Comín, aplicar la inmersión lingüística en Cataluña o actuar ante la coacción a hijos de guardias civiles en esa comunidad.
Rivera se ha quejado de que desde hace cuatro meses Rajoy ya no consulte con Ciudadanos, su socio principal, los pasos que da en relación con la crisis política catalana. «Hasta ahora nos llamaba, pero desde hace unos meses, con las encuestas y los follones internos, ha dejado de hacerlo», ha señalado Rivera, antes de acusar al Gobierno de sentirse ahora «más cómodo» en Cataluña con los nacionalistas y estar «a lo que marque» el PNV.
«No estoy dispuesto a que los nacionalistas marquen la agenda a los constitucionalistas porque así hemos llegado hasta aquí», ha asegurado Rivera, quien ha insistido a Rajoy que si a partir de ahora quiere pactar con el ERC o el PNV, lo puede hacer, «pero los españoles tienen que saber que no cuenta con el apoyo de Ciudadanos».
En todo caso, el líder de la formación naranja ha querido dejar claro que esta ruptura con el Gobierno no afectará a los Presupuestos Generales de 2018, unas cuentas, ha dicho, que ya están pactadas, sino únicamente a la aplicación del 155.
«Una disputa para la galería»
Por su parte, el secretario General de Podemos, Pablo Iglesias, considera que la bronca entre el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, y el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy no va a tener ninguna consecuencia porque es una «disputa para la galería».
«Rivera puede decir »me enfado y no respiro» pero ya sabemos lo que pasa cuando dice que se enfada mucho, que se traduce en absolutamente nada», ha señalado en declaraciones a la Sexta.
Para Iglesias, está claro que Ciudadanos «está sosteniendo al PP» y que «los corruptos gobiernan» con el apoyo de la formación de Albert Rivera y considera por tanto que «estas disputas para la galería son poco creíbles».