En concreto, los bonos con vencimiento en enero de 2030 se han vendido en una operación en la que BNP Paribas, Crédit Agricole CIB, HSBC y Santander han actuado como entidades colocadoras.
La compañía de telecomunicaciones remarca que con esta emisión de deuda continúa llevando a cabo una gestión «prudente y activa» de su balance.