Broadcom acelera así sus planes de recolocación después de que el Comité de Inversión Extranjera (CFIUS) del Gobierno de EEUU, ordenara a Qualcomm aplazar su reunión anual de accionistas del 6 de marzo para iniciar una investigación durante al menos 30 días, una iniciativa que arrojaba nuevas dudas sobre la oferta revisada de 117.000 millones de dólares (94.900 millones de euros) de Broadcom por su rival.
«Broadcom, que en todos los aspectos importantes es una empresa estadounidense, ha recibido anteriormente la aprobación por CFIUS en sus adquisiones previas de firmas del país y siempre se ha involucrado productivamente con el comité para garantizar la seguridad nacional de EEUU», ha indicado Broadcom.