El director general de la Organización Mundial del Comercio (OMC), Roberto Azevêdo, mostró hoy su «clara preocupación» por el anuncio de Washington de que impondrá aranceles a las importaciones de acero y aluminio, a la vez que subrayó que una guerra comercial «no beneficia a nadie».
«La OMC está claramente preocupada por el anuncio de los planes estadounidenses para los aranceles sobre el acero y el aluminio», afirmó Azevêdo en un comunicado.
«El potencial para una escalada es real, como hemos visto con las respuestas iniciales de otros. Una guerra comercial no beneficia a nadie», concluyó el director general.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró hoy en Twitter que las guerras comerciales «son buenas y fáciles de ganar», después de anunciar el jueves aranceles a las importaciones de acero de hasta el 25 % y al aluminio de hasta el 10 % a partir de la próxima semana.
Gobiernos, instituciones, patronales, productores y mercados reaccionaron, sin embargo, con temor a las consecuencias de esas medidas proteccionistas estadounidenses y crecieron las voces para responder «con decisión» a la amenaza.