La decisión de Moody’s se suma a la mejora de calificación desde ‘B-‘ a ‘B’ con perspectiva positiva, anunciada el pasado viernes por Fitch, mientras que S&P Global elevó la nota de solvencia a largo plazo de Grecia hace un mes, mejorando el rating del país heleno a ‘B’ desde ‘B-‘, asignando a la calificación una perspectiva positiva.
En su análisis, Moody’s destaca que Grecia ha conseguido mejoras significativas bajo el actual programa de ajuste y expresa su confianza en que, además, estas serán sostenidas a lo largo del tiempo.
«Grecia completará con éxito su tercer programa de asistencia y volverá a financiarse de forma autosuficiente y en el mercado. Su salida limpia se verá apoyada a corto plazo por un sustancial colchón de liquidez y a largo plazo por el fuerte compromiso de los acreedores del país heleno con un alivio de la deuda griega.
«El riesgo de otro impago o reestructuración de la deuda en manos de inversores privados ha disminuido de manera material», apunta Moody’s, señalando que volverá a subir el rating de Grecia si las reformas implementadas ofrecen mejores resultados de los proyectados, permitiendo un crecimiento económico sostenido que reduzca más rápidamente la ratio de deuda pública.