En Francia es hoy día festivo pero en unas horas, mañana martes, la dirección del canal France 2 emitirá un comunicado sobre el último giro de tuerca de un caso que ha dado la vuelta al mundo.
Sin embargo poco más puede añadir a lo que siempre ha defendido. El canal siempre ha afirmado su voluntad de «participar en cualquier investigación independiente llevada a cabo conforme a estándares internacionales».
Y es que una comisión de investigación gubernamental israelí ha concluido, trece años después, que el niño palestino Mohamed Al-Dura, uno de los símbolos de la segunda Intifada, no murió por fuego israelí en un tiroteo en Gaza.
Israel rebate por su parte las imágenes del canal de la televisión pública francesa, casi una leyenda en territorio palestino, que fueron difundidas en el 2000, en las que el niño aparecía inconsciente junto a su padre. La comisión, exige además una rectificación.
Las imágenes fueron tomadas el 30 de septiembre de 2000. Abrieron todos los informativos del mundo y mostrarían la muerte del menor, agazapado junto a su padre, atrapados por un tiroteo entre fuerzas israelíes y milicianos palestinos en la franja de Gaza.
El niño se convirtió en símbolo del alzamiento palestino contra la ocupación y de las denuncias palestinas a Israel.
Charles Enderlin, el autor de las imágenes y corresponsal del canal en France 2, ha contestado con una pequeña entrada en su blog. Asegura que “el informe israelí no menciona la hospitalización de Jarnal al Dura (el padre del niño, supuestamente herido en el tiroteo), en el hospital militar de Amman (Jordania), ni de los cirujanos que lo operaron 48 horas después… Al margen del hecho que los expertos israelíes cuyo nombre no conocemos, dan a entender que también allí se hace teatro… (…) Tenemos el expediente médico jordano que ha sido considerado perfectamente creíble por el Profesor Raphy Walden del hospital israelí Tel Hachomer”.
Israel ha hecho público ese informe, un par de días antes de que un tribunal francés se pronuncie sobre un caso que aborda este asunto. Se trata de una demanda por difamación interpuesta por el corresponsal de France 2, Charles Enderlin, contra Philippe Karsenty, presidente y fundador de Media-Ratings, una agencia francesa de calificación de los medios de comunicación. Karsenty defendió en 2004 que Enderlin debía ser cesado de sus funciones porque las imágenes no correspondían con la realidad.
Ahora, parece que Tel-Aviv toma posiciones y asegura que el niño aparece con vida al final de la grabación del canal francés. «En contra de lo que alega el reportaje de que el niño fue asesinado, la investigación del comité sobre el material bruto muestra que en las escenas finales, que no fueron difundidas por France 2, el chico aparece con vida«, reza el informe del Ministerio de Asuntos Internacionales y Estrategia.
El padre de Al Dura, por su parte, reitera que el informe israelí es una «nueva fabricación» y ha exigido una investigación internacional con participación árabe, según ha dicho a Reuters . Incluso estaría dispuesto a exhumar a Al Dura para «clarificar las circunstancias de su muerte».