Gestamp registró un beneficio neto de 239,7 millones de euros en 2017, lo que supone un aumento del 8,3% en comparación con el ejercicio 2016 (221,3 millones), según informó este lunes la compañía especializada componentes para la industria del automóvil.
La facturación del grupo alcanzó los 8.202 millones de euros en 2017, con un alza del 8,6% respecto al año precedente. Además, el resultado bruto de explotación (Ebitda) fue de 890 millones de euros, un 5,8% más. La plantilla mundial de la compañía ha continuado creciendo, hasta tener más de 41.000 empleados en 21 países.
El consejero delegado de Gestamp, Francisco López Peña, explicó que “la compañía se benefició de una alta visibilidad de ingresos debido a la naturaleza de su negocio”.
De hecho, agregó, “nuestros volúmenes estimados en la cartera de pedidos cubren más del 90% de los ingresos previstos hasta 2020”.