El presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Sebastián Albella, ha dejado entrever que no acepta interferencias políticas en las decisiones que debe tomar la entidad y ha dicho que se siente «cómodo», sobre todo tras mantener el permiso concedido a la opa de Atlantia sobre Abertis.
Durante su intervención en la comisión del Congreso que investiga el origen de la crisis financiera y el rescate bancario, Albella ha sido preguntado por el diputado de Ciudadanos Fernando Navarro en torno a la independencia de la CNMV y posibles interferencias políticas.
A la intervención de Navarro, que se ha referido al sistema de nombramiento de los presidentes de los organismos reguladores y supervisores, Albella ha respondido: «este año me he sentido muy cómodo y sobre todo en relación a las autorizaciones (emitidas por la CNMV) estos días».
Albella ha negado presiones políticas y ha sido tajante al señalar que la CNMV tiene su misión. «Entiendo que otras áreas de la Administración estén preocupados de otras perspectivas», ha apuntado.
«Nosotros hacemos lo que tenemos que hacer sin dejarnos interferir y creo que todo ha sido bastante correcto», ha indicado en relación al mantenimiento de la autorización a la opa de Atlantia sobre Abertis.
El Consejo de la CNMV decidió el pasado lunes mantener el permiso concedido en octubre a la opa del grupo italiano, al considerar que reúne «todos los requisitos exigidos» en la normativa sobre ofertas públicas de compra.
El supervisor bursátil tomó esta decisión a pesar de los requerimientos de los ministerios de Fomento y Energía, que le habían pedido que revocara la autorización porque la había otorgado sin que Atlantia contara previamente con el permiso del Gobierno.