Dice Alex Ferguson, entrenador del Manchester United, que aquí la cuestión es “quién meterá el primer gol”. El veterano manager (71 años), cumplirá hoy contra el Madrid su partido número 190 en la máxima competición europea y se plantea este nuevo enfrentamiento como algo sabido, conocido, disfrutado…
Seguí su rueda de prensa de ayer y estuvo genial. Y no solo porque fuera capaz de hilvanar varias ideas seguidas sin equivocarse, sino por salpicarla de elegancia, buenas palabras, reconocimiento de la categoría del rival y, sobre todo, con un buen humor que contagió en varias ocasiones a los presentes. Lo mismito que aquí.
A su lado estaba Ryan Giggs (39 años). Habló después del mister porque el partido de hoy puede ser su número 1.000 con el Manchester. “Estoy muy orgulloso de poder jugar mi partido número mil en una ocasión como esta. Si miro a mi carrera me siento satisfecho de haber podido jugar siempre en el mismo club y con el mismo entrenador, habiendo tenido grandes compañeros. Cuando eres viejo disfrutas de los éxitos con más intensidad. Cuando ganamos la segunda ‘Champions’ mi satisfacción fue mayor que la primera vez. Ahora, si le ganamos al Madrid mi placer será más grande todavía”.
Pues no. Aquí la cuestión no es quien mete el primer gol. La cuestión, gane o pierda el Manchester es que hay un grupo de gente: al menos un entrenador y un jugador que disfrutan haciendo lo que hacen. En España eso casi no existe en el deporte, tampoco en la política, y cada vez menos en el trabajo. Casi ha desaparecido la alegría y el buen humor. La crisis me dirán… No podemos echar la culpa de todo a la crisis. Aquí el problema es la credibilidad de las personas, su falta de convencimiento y la tristeza que transmiten. Y la vejez o madurez, como la quieran llamar, no tiene nada que ver. Ferguson y Giggs venden optimismo y, si encima ganan, doble alegría. Así da gusto trabajar. Y eso que no he querido saber lo que ganan…