El Gobierno incluirá en la Ley Orgánica de Régimen Disciplinario de las Fuerzas Armadas un nuevo tipo de falta grave con la que se pretende castigar la pertenencia de militares a grupos u organizaciones que «persigan fines manifiestamente ilegales» o grupos radicales, sea cual sea su naturaleza, si bien estos cambios se empezaron a plantear después de que tres exsoldados fueran identificados como miembros o colaboradores de células yihadistas.
Dado que el régimen disciplinario ya fue aprobado definitivamente a principios de diciembre, el Grupo Popular en el Congreso ha previsto esta modificación en las enmiendas parciales que ha presentado al proyecto de ley del nuevo Código Penal Militar, que se encuentra en plena tramitación parlamentaria.
Así pues, en una de sus enmiendas, recogida por Europa Press, el PP propone añadir una disposición final cuarta bis al texto del Código Penal Militar para que, a su vez, se añada un nuevo tipo de falta al régimen disciplinario militar.
PERSEGUIR FINES MANIFIESTAMENTE ILEGALES
De este modo, los miembros de las Fuerzas Armadas cometerán falta grave en sus funciones en caso de «constituir un grupo u organización que persiga fines manifiestamente ilegales que vulneren las reglas esenciales que definen el comportamiento del militar».
También será falta grave «afiliarse, pertenecer o colaborar con tal grupo u organización o promover sus actividades, publicitarlas, así como inducir o invitar a otros militares a que lo hagan».
Según el nuevo régimen disciplinario militar aprobado en diciembre, las sanciones que pueden imponerse por faltas graves son la sanción económica de ocho a 15 días, el arresto de 15 a 30 días, la pérdida de destino y la baja en el Centro Docente Militar de Formación.
TRES EXMILITARES YIHADISTAS
Estos cambios en un régimen disciplinario recién aprobado mediante la modificación del Código Penal Militar se plantearon ya el pasado otoño, después de que un exmilitar fuera identificado como colaborador de una célula yihadista que fue desarticulada en Melilla y Marruecos.
Con éste ya son tres los antiguos miembros de las Fuerzas Armadas españolas los que han sido identificados desde enero de 2014 como integrantes o colaboradores de células yihadistas, aunque sólo uno de ellos fue detenido.
Con la reforma de la Ley, el Gobierno pretende que, en caso de que se identifiquen conductas o comportamientos que lleven a pensar en la pertenencia de ciertos militares a determinados grupos, se pueda actuar en el seno de las Fuerzas Armadas, independientemente de que luego los militares en cuestión puedan ser juzgados por algún delito.
En la misma enmienda, el Grupo Popular plantea modificar la redacción de otra falta grave. En lugar de «dar órdenes que sean contrarias al ordenamiento jurídico o que se refieran a cuestiones ajenas al servicio», los »populares» prefieren que lo que se sancione sea «dar órdenes que sean manifiestamente ilegales».