Así se ha pronunciado este viernes el representante de ASFASPRO en el Consejo de Personal, Pedro Amador, al ser preguntado por la polémica surgida después de que tres eurodiputados catalanes acudieran ante la Comisión Europa pidiendo protección por una supuesta «amenaza militar», que aludía a declaraciones de exmilitares.
Amador ha insistido en que los miembros de las Fuerzas Armadas van a «cumplir la legalidad siempre». «Siempre actuamos poniendo la Constitución por delante», ha recalcado por su parte el presidente de esta asociación, Higinio Fernández.
Dicho esto, el presidente ASFASPRO ha asegurado que su asociación respalda las palabras del ministro de Defensa, Pedro Morenés, quien ha negado que exista ningún «ruido» en las Fuerzas Armadas del que hablan los nacionalistas catalanes.
En cualquier caso, ambos han insistido en que la función de su asociación no es responder al debate político, porque, como militares, no pueden expresar su «opinión» y deben ajustarse a la «neutralidad política».
«Nosotros tenemos bien claro cuáles son nuestras limitaciones como miembros de las Fuerzas Armadas, están asumidas», ha recalcado Amador, antes de hacer hincapié en que su papel en la asociación es «luchar por los intereses profesionales» de sus compañeros.
EN EL CONSEJO DE PERSONAL
ASFASPRO es una de las dos asociaciones que han conseguido representación en el Consejo de Personal de las Fuerzas Armadas, que se constituirá el próximo lunes. Según ha explicado su representante, cuentan ya con 1.300 miembros y aspiran a cerrar el año con cerca de 2.000.
Amador se ha mostrado «orgulloso» de poder representar a los suboficiales en este órgano, porque es un colectivo al que «nunca» se ha «escuchado» en Defensa. Ha alabado el ambiente «positivo» en el que se han desarrollado hasta ahora las reuniones con la Subsecretaría de Defensa, encargada de los asuntos de personal, y ha expresado su confianza de que impere «la buena voluntad» en las tareas que afrontan.
Por su parte, ha asegurado que ASFASPRO no va a tener un discurso de «máximos» en sus reivindicaciones y va a tratar de colaborar con la presentación de propuestas de mejora para esta escala, la más «agraviada» por las últimas leyes de personal, tratando además de que tengan el menor impacto posible en el Ministerio. Su objetivo es, según ha explicado, que imperen los criterios de «mérito y capacidad» a la hora de desarrollar la carrera militar.
Para ello, esperan que la reforma de la Ley de la Carrera Militar que debe acometerse, por imperativo legal introducido en la Ley de Derechos y Deberes de los miembros de las Fuerzas Armadas, acabe con algunas de las situaciones que han acabado en la «desmotivación» de los suboficiales.
En este sentido, han lamentado que el Congreso de los Diputados no haya empezado a trabajar sobre esta cuestión, pese a que la ley de derechos y deberes establecía que la reforma debía aprobarse antes del asado 1 de abril.
Por otra parte, ASFASPRO también ha lamentado el posible cierre de la Academia General Básica de Suboficiales de Talarn (Lérida) que, de llevarse a cabo, privará a los suboficiales de su «nexo de unión y de identidad» y hará volver a un sistema de enseñanza «antiguo».