Así lo ha señalado este martes la arquitecta encargada de la dirección técnica de la obra, Isabel Bestué, que ha visitado la muralla, que se encuentra en pleno corazón del barrio del Albaicín, junto al subdelegado del Gobierno en Granada en funciones, Antonio Cruz, y el delegado provincial de Cultura, Pedro Benzal.
Según la arquitecta, las obras han consistido en la eliminación de elementos añadidos, antenas sobre la propia muralla, vegetación infestante, y retacados de fábrica, además de la limpieza manual a cepillo con eliminación de líquenes, y la consolidación de superficies con agua de cal y silicato de etile, fábricas, coronaciones y paramentos de muros.
Se han realizado también una serie de catas en diferentes puntos de la base de la muralla que conforman la existencia de estructuras previas asociadas a la muralla y niveles de uso muy inferiores a los existentes en la actualidad.
La actuación, aprobada por el Consejo de Ministros el pasado mes de junio, fue declarada como obra de emergencia debido al peligroso estado en que se encontraba el tramo de la muralla sujeta a intervención. De hecho, presentaba un gran deterioro en la parte superior debido a la presencia de elementos vegetales y urbanos ajenos a su estructura, que habían ocasionado la pérdida de la geometría de la coronación y, por tanto, de la protección natural contra agentes atmosféricos, con el consiguiente peligro de derrumbamiento de piezas sueltas.
El subdelegado del Gobierno ha destacado la importancia de esta intervención y ha reiterado el compromiso del Ministerio de Cultura con la preservación de las Murallas de Granada donde aún es necesario seguir trabajando.
Por su parte, el delegado de Cultura de la Junta de Andalucía en Granada ha explicado que desde la delegación existe una gran preocupación por el estado de las murallas de la ciudad que son de titularidad estatal. Situación que, ha anunciado, les ha llevado a mantener conversaciones con representantes del Ministerio de Cultura para que éstos se hagan cargo de financiar un proyecto de intervención global en ellas, que una vez redactado, sería presentado al 1% cultural del Ministerio de Fomento. «La Junta en solitario no puede recuperar los elementos defensivos, pero sí puede colaborar en la iniciativa», ha apuntado.
Además de en la muralla zirí, el Ministerio de Cultura ha intervenido en la torre de la muralla »Cadima», situada en la calle Guinea, que también presentaba un deficiente estado de conservación, tanto en su estructura como en su coronación. Ambas intervenciones han supuesto una inversión global de 168.504 euros.
Las Murallas de la ciudad de Granada son un bien de titularidad estatal, afectado al Ministerio de Cultura, y fue declarado BIC en 1992.