En un comunicado, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente destaca el hecho de que no se hayan modificado los textos sobre Rendimiento Máximo Sostenible y sobre descartes, «lo que supone un logro muy importante porque se trataba de los puntos donde el Consejo había llegado al límite».
Según el secretario general de Pesca, España había apostado por un acuerdo bajo la presidencia irlandesa debido a su mayor experiencia en materia pesquera y porque había dejado muy claro que no quería una reforma de la PCP en contra de los intereses de España».
«Por lo tanto, el deseo del Gobierno era que se cerrara un acuerdo lo más rápidamente posible, siempre que se respetaran nuestras exigencias mínimas», añade Domínguez, quien recordó que el Consejo llegó a un límite que no podía rebasar en materia de descartes y que era el Parlamento quien debía flexibilizar sus posturas para hacerlas compatibles.
Asimismo, también considera que esta reforma va a traer para España grandes cambios en la forma de pescar y también algunos beneficios. «La política de descartes va a introducir una flexibilidad en la manera de gestionar nuestras cuotas, va a permitir capturar especies de las que no tenemos cuota y que podrán computarse contra la cuota de la especie principal. Se trata de romper el principio de estabilidad relativa, algo por lo que había luchado España durante los últimos años», recalcó.