Lumbreras, de 60 años, fue hallado en su vivienda de la calle Julián Peña de Valencia, con golpes por todo el cuerpo y maniatado y con parte de la casa revuelta. Fueron los vecinos quienes alertaron a la Policía, que cuando llegó a la casa se encontró con el cadáver.
La causa está secreta y el juzgado no ha precisado el delito o delitos que inicialmente se atribuyen al sospechoso. El juzgado de guardia se ha inhibido de las diligencias en favor del Juzgado de Instrucción número 8 de Valencia, que es el competente en la investigación de los hechos.
Tras el descubrimiento del cadáver, el pasado 5 de diciembre, las pruebas oculares y la inspección del domicilio de la víctima, los investigadores descartaron la hipótesis de un crimen homófobo.
Representantes de partidos como Podem, PSPV, Compromís o Pacma y diversas entidades, muchas de ellas relacionadas con el colectivo LGTBI, expresaron a través de las redes sociales sus condolencias y tristeza por el asesinato de Lumbreras, al que calificaron de «gran luchador» por los derechos de esta colectividad y «figura indispensable para entender los avances» en sus derechos. Asimismo, Les Corts o el alcalde de Valencia, Joan Ribó, se sumaron a las condolencias.
Lambda le dedicó un homenaje el domingo 16 de diciembre en su sede, para recordar su persona y celebrar «el papel que ha tenido Fernando en esta vida, llena de solidaridad con múltiples causas». El actual coordinador del colectivo lo ensalzó como «modelo a seguir» y «ejemplo de dignidad en la lucha por los derechos LGTBI».
Durante el acto se dejaron una serie de papeles en blanco en varias mesas, donde la gente pudo escribir «cartas a Fernando», que se recogerán todas en un libro dedicado a la víctima.