El Ministerio Fiscal, en una nota de prensa, ha pedido que el Gobierno de Erdogan respete la ley y los derechos fundamentales de los ciudadanos turcos, así como de los jueces y fiscales, en «todos los procedimientos penales y sancionadores». De este modo, se suma al llamamiento del Consejo Consultivo de Fiscales Europeos.
Asimismo, ha rechazado la «purga masiva de los miembros de las instituciones llamadas a defender la paz, la ley y los derechos de los ciudadanos».
Además, ha recordado que el Gobierno turco ha suspendido la Convención Europea para los Derechos Humanos, hecho que la fiscalía ha calificado de inquietante y ha destacado que esta suspensión no implica «la tortura, la esclavitud ni la vulneración del derecho a la vida».