En la sentencia, recogida por Europa Press, el tribunal condena a Narciso P.F. por seis delitos continuados de abuso sexual a menor de 16 años con prevalimiento, y además de la pena de cárcel, estipula 13 años de prohibición de acercamiento a las víctimas y diez de inhabilitación para trabajar en contacto con menores.
La sentencia le condena también a pagar en concepto de indemnización 3.000 euros a los padres de cada víctima, y le impone siete años de libertad vigilada.
Según la sentencia, el acusado aprovechó su condición de monitor para hacer tocamientos en los genitales a las menores cuando asistían a las clases que impartía en el gimnasio de Salt.
Narciso P.F. se valió, según el tribunal, de la ascendencia que su cargo implicaba sobre las alumnas, que lo llamaban con el término japonés »sensei», para abusar de ellas durante los ejercicios de estiramientos.