En su escrito, el vicepresidente esgrime que antiene la condición de investigado por parte del juzgado de instrucción 13 de Barcelona –que instruye la causa por la organización del 1-O– y que, por tanto, se acogería a su derecho de no responder a las preguntas. La cuestión es que, por la condición de aforado de Aragonés, el juzgado número 13 no le ha procesado y se ha inhibido en favor del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), que tampoco ha abierto causa formal contra él, por lo que su situación procesal actual es confusa.
Fuentes de su entorno sostienen, sin embargo, que el vicepresidente continua «materialmente investigado» por este juzgado, por lo que concluye que los más adecuado sería no tener que declarar este martes, una opción por la que han optado otros investigados que han sido llamados como testigos al »procés».