La última en ganar el Festival de Eurovisión y traerse el premio para España fue Salomé en 1969. Desde entonces, los artistas que nos han representado no han conquistado al público eurovisivo y, aunque algunos hicieron unas actuaciones de poner los pelos de punta (como Pastora Soler) se tuvieron que formar con puestos cuanto menos pobres.
Repasamos los diez artistas que debieron quedar mejor en la final del Festival de Eurovisión por unos u otros motivos:
1. Pastora Soler nos emocionó. La artista actuó en Eurovisión 2012 y emocionó a todos los que estábamos en nuestras casas con un chorro de voz que ya quisieran muchos, pero quedó décima. La lástima es que tuvo como competencia a Loreen, que fue quien ganó.
2. El baladón de Sergio Dalma. ¿Cuántas veces se ha balado »Bailar pegados» en toda Europa? Miles, millones. Sólo por eso, el catalán se mereció más de un cuarto puesto.
3. Soraya, la reina de la música dance. Ahora triunfa en Europa con sus canciones porque Soraya es quizá, una de las artistas con más proyección internacional que hemos llevado a Eurovisión. Terminó penúltima en 2009.
4. El boom mediático de Rosa. Sólo porque fueron los más inocentes y los que más éxito han tenido tras »OT», los triunfitos se merecían más de un séptimo puesto. ¡Y encima cantaron en inglés!
5. Julio Iglesias debió ganar… ¡porque sí! Porque es nuestro artista más conocido fuera de nuestras fronteras, porque es todo un hombre de récord Guinness y porque es el padre de Enrique, Julio Jr y Chábeli. »Gwendoline» se merecía más de un cuarto puesto.
6. ¿Te acuerdas del »Dile que la quiero»? Seguro que sí. Porque el tema de David Civera nos acompañó durante varias temporadas playeras y aùn hoy sigue sonando. Quedó sexto.
7. Ramón y su tema super eurovisivo. El tercer triunfito no gustó mucho a pesar de llevar una canción absolutamente del gusto eurovisivo, marchosa y con coreografía llena de bailarines. Quedó décimo.
8. La rumba de Peret. Si hay algo más español que la rumba, que alguien lo diga. Peret no se merece haber quedado en un décimo puesto con su »Canta y sé feliz». ¡Ojalá fuera ahora él a Eurovisión a animar el cotarro!
9. Mítico ya entonces, Raphael. El cantante fue dos años seguidos a Eurovisión. Pero sin duda, nos quedamos con su interpretación de »Yo soy aquel» porque ya entonces, el artista era todo un actor sobre el escenario.
10. Beth, por ser la más guapa. Aunque desafinó, Beth lució una imagen espectacular: bronceadísima, con un top metalizado y pantalones blancos. No mereció el octavo puesto.