Antena 3 echa gasolina a la batalla de la audiencia de los lunes. Anoche despidió a »La cúpula» y en siete noches verá la luz la esperada »El tiempo entre costuras». La ficción protagonizada por Adriana Ugarte se enfrenta a la mismísima reina »Isabel» en La 1 y al líder indiscutible de los lunes »La voz».
El talent show musical presentado por Jesús Vázquez fue visto ayer por 3,7 millones de espectadores, un 24,5% del share. »Isabel» le sigue de cerca con 3.710.000 espectadores.
ahora llegará »El tiempo entre costuras», que puede heredar para empezar a los 2,7 millones de espectadores que se quedan huérfanos tras el adiós de »La cúpula» y luchará por conseguir que la reina brille poco y a Telecinco le tiemble la voz.
Si hay una palabra que defina »El tiempo entre costuras» es emoción. Adriana Ugarte es la protagonista indiscutible de la serie, en la que sale en el 99 por ciento de las escenas
Y no es para menos. El primer episodio de »El tiempo entre costuras», que llegará a la pequeña pantalla el próximo lunes, hizo suspirar y llorar a más de uno el día de su estreno hace ahora dos meses, y levantó a todo el palco de butacas al finalizar para aplaudir a los actores y productores de la serie que, junto con la autora del libro en el que se basa la ficción, María Dueñas, pudieron sentir que la serie había llegado al corazón de la gente.
La producción de Boomerang será, sin duda alguna, la serie de la temporada que acaba de arrancar, ya que cuenta con una escenografía, ambientación, vestuario y música realmente espectaculares.
A esto hay que sumarle la presencia en pantalla de una pletórica Adriana Ugarte que te toca el alma, a la que te crees ya ría o llore por su naturalidad, emotividad y por un rostro de muñeca que la hace encarnar a la perfección la inocencia de la joven Sira en el primer episodio. Adriana ha dicho que para ella este ha sido su mejor papel, y está claro que las alabanzas se quedan cortas para comentar el increíble trabajo de la actriz en esta producción.
Y por supuesto no podemos olvidar al resto del elenco. En el primer episodio conoceremos al primer novio de Sira, interpretado por Raúl Arévalo y a su madre, a la que da vida la inconmensurable Elvira Mínguez, que pone los pelos de punta.
Otro que levantará pasiones será Rubén Cortada, que da vida a Ramiro, el amor pasional que lleva a Sira a Tánger al perder la cabeza por él y que te hace comprender porqué ella lo deja todo por este moreno de ojos verdes penetrantes y cuerpo de Adonis griego.
Así arranca »El tiempo entre costuras»
Olvídate de dejar aparcadas las emociones porque con »El tiempo entre costuras» las tendrás a flor de piel durante todo el capítulo. En el primero de los 11 conocemos a Sira desde niña (pero sin detenerse en su infancia ni en su adolescencia) y al entorno en el que se ha criado, dentro de un taller de costura en el que desde pequeña ha aprendido a coser para mujeres adineradas.
Enseguida vemos a Sira (Adriana Ugarte) de veinteañera y cómo cree enamorarse de un joven que estudia para funcionario, Ignacio (Raúl Arévalo), y al que no llegará a amar como ella entiende el amor. En esos momentos, Sira se encuentra viviendo en el Madrid previo a la Guerra Civil.
Antes de casarse con Ignacio, Sira conoce casualmente en una tienda de máquinas de escribir a Ramiro (Rubén Cortada), un joven apuesto, de una belleza casi inhumana y que la hará sentir la pasión de un amor del que no podrá escapar.
Los dos actores te hacen sentir la química con una sola mirada, la pasión con un sólo roce y el amor que cuando llega no puedes escapar de él por muy complicado que parezca. Ella deja a su novio para vivir su historia junto a Ramiro pese a la negativa de su madre, ya que en el fondo es un superviviente, un vividor que la llevará a Tánger y donde la hará vivir una vida que realmente no es para ella.
Al final del primer capítulo veremos cómo Ramiro se marcha de Tánger dejando a Sira sola y embarazada para emprender una nueva aventura. Ella, completamente destrozada emprederá un viaje sin rumbo fijo y en el que la mirada de la actriz te hace ver a una mujer rota de dolor, sin salida, vacía y con el corazón en mil pedazos.
Los escasos 60 minutos del primer capítulo de »El tiempo entre costuras» se hacen cortos y sólo piensas en ver el siguiente episodio. La emoción con la que Adriana se mete en la piel de Sira se transforma en tu propia emoción y se te mete debajo de la piel inundando todos tus sentidos. A esto hay que sumarle la música, el vestuario y los escenarios en los que se desarrolla la serie, que te hacen creer que realmente estás en la España de los años previos a la Guerra Civil. »El tiempo entre costuras» es un homenaje a la emoción más pura… con mayúsculas.