Ryan Germick, responsable del equipo de ilustradores y creativos que hacen los famosos Doodles para Google asegura que «su objetivo principal es hacer reír a sus colegas».
En una entrevista con la BBC, Germick desvela que los famosos garabatos que adornan el logotipo del famoso buscador en algunas ocasiones son fruto del trabajo de un grupo pequeño, cuyos integrantes se llaman a sí mismos los doodlers, que ocupan una pequeña oficina en California donde dar rienda suelta a sus ideas.
Recordando el 115 aniversario de la aviadora Amelia Earhart, o las diversas disciplinas del Atletismo durante los Juegos de Londres, los Doodle de Google son consideradas obras de arte en todo el mundo. Pese a ello, Ryan Germick asegura con humildad que no sabe cómo funcionará un Doodle en concreto: «el cerebro humano no está preparado para entender cómo millones de personas interpretan algo. Para mí, se trata de hacer reír a mis colegas o aprender una técnica nueva. Si lo logro, he cumplido con mi objetivo», asegura.
Este genio de la ilustración hereda el papel que tuvo en la compañía Dennis Hwang, un webmaster de Google al que le fue encargado en un principio dibujar los primeros Doodles que lanzó el buscador.
Un garabato para avisar de una fiesta
El Doodle nace en agosto de 1998, cuando los fundadores de Google Larry Page y Sergey Brin, quisieron anunciar que acudirían a un festival llamado Burning Man del desierto de Nevada. Para el día 30 de agosto de ese año se colocó el dibujo de un monigote detrás de la segunda «o» de la palabra Google.
La forma de enviar este mensaje a los usuarios del popular buscador, aunque presentaba una t9osca factura, tuvo una buena acogida, y de esta manera quedó fijada en la compañía la costumbre de celebrar eventos y efemérides variando de forma divertida o artístcia el logo de Google.