Miles de peatones mueren cada año en accidentes de tráfico, pero hasta el momento los fabricantes de automóviles no se habían atrevido a invertir en tecnologías aplicadas a proteger a los peatones.
Ahora, el fabricante sueco de automóviles Volvo ha creado el primer airbag externo que podría salvar vidas muchas. Según informó Der Spiegel, el nuevo Volvo V40 será el primer automóvil fabricado en cadena con un airbag externo, que se despliega delante del parabrisas si se atropella a un peatón.
Con el V40, Volvo está ofreciendo algo reclamado desde hace mucho tiempo por los expertos en seguridad vial: mejoras en la seguridad de los coches que beneficien a los que no están dentro del mismo. Der Spiegel recoge que en Alemania, durante 2011, 612 peatones perdieron la vida atropellados, 136 más que en el año anterior.
Pese a que los techos de los coches y la parte delantera de las carrocerías deben ser ahora menos lesivas, por normativa europea, los investigadores saben que siguen siendo las áreas que causan las lesiones más graves en la cabeza de los atropellados, siendo generalmente las que provocan la muerte.
El problema es que conjugar un parabrisas menos lesivo, con la seguridad de los pasajeros del coche no es tarea fácil, ya que el marco del parabrisas juega un papel importante en la rigidez de la carrocería, interpretada como un todo.
El marco del parabrisas es el que protege a los pasajeros si el coche vuelca, así que Volvo ha situado un airbag delantero exterior, al considerarlo el único elemento capaz de amortiguar el impacto de un peatón contra el coche.
La decisión de Volvo aumenta la presión sobre el resto de la industria, ya que la compañía con sede central en Gotemburgo, aunque vende sólo unos 450.000 coches al año, tiene una larga tradición como firma pionera en seguridad.
El nuevo airbag para peatones de Volvo supone un importante despliegue de tecnología. Siete sensores en la parte delantera del vehículo deben ser capaces de percibir que el coche está a punto de golpear una pierna humana y no, por ejemplo, un carrito de compras. Después, varias cápsulas de pólvora disparan el capó fuera de sus goznes, abriendo una rendija a través de la cual emerge el airbag, expandiendo su enorme volumen de 120 litrosen una fracción de un segundo.
Pese a dispararse el airbag, el conductor no pierde totalmente la visión de la carretera, ya que la bolsa se expande en forma de plátano, siguiendo la línea del parabrisas, pero dejando gran parte del mismo sin tapar.
Además, nadie podrá dedicarse por aburrimiento a disparar los airbags de los Volvo a patadas, cuando estén aparcados, ya que se despliegan únicamente cuando el vehículo está viajando a velocidades de entre 20 y 50 kilómetros por hora.