En el creciente mercado de las citas online surge KikiApp, la primera plataforma que pone en contacto a usuarios que quieren conocer gente, mientras se divierten llevando a cabo distintos planes de ocio.
Esta aplicación social, fundada en Marbella, funciona mediante geolocalización, y conecta a un usuario que busca compañía con otro que está dispuesto a ofrecer su tiempo a cambio de una remuneración económica.
La plataforma ofrece al usuario varios planes con distintas tarifas fijas: tomar un café (5 euros), ir al cine a ver una película (10 euros), tomar o una copa (15 euros), compartir una cena en un restaurante (20 euros), e incluso viajar a otra ciudad (100 euros).
El usuario que busca un acompañante abona una cuota dependiendo del plan que elija. La app garantiza al 100% que una vez se hace el pago, esa cita se va a llevar a cabo.
En otras aplicaciones que ya están en el mercado, las mujeres reciben notificaciones durante todo el día, mientras que los usuarios masculinos no alcanzan su objetivo y pierden su dinero con suscripciones que no son útiles. Kiki, sin embargo, apuesta por otro modelo de negocio, en el que no existen suscripciones y el usuario solo paga por la cita con el plan que ha elegido.
El funcionamiento es muy sencillo. Hay que descargar la app de Kiki en el móvil, disponible para IOS y Android, registrarse (subir una fotografía, introducir datos como el nombre o la edad, y compartir los gustos e intereses del usuario), buscar y seleccionar a la persona con la que se quiere ir a la cita, chatear con la persona seleccionada y seleccionar la hora, el día y el plan.
Esta aplicación pretende ayudar a sociabilizar a personas que, por ejemplo, llegan nuevas a una ciudad y no conocen a mucha gente, personas con trabajos con horarios incompatibles a los de sus amigos, o personas que simplemente quieren vivir una experiencia diferente y conocer a gente mientras hacen un plan a su medida.
Por otro lado, permite a los usuarios que se registran ofrecer su tiempo a cambio de una remuneración económica, mientras se divierten y conocen a otras personas. Estos, reciben el 70% del importe que ha pagado su acompañante, mientras que la app se queda el 30% de cada transacción.
De esta forma, la tecnología es capaz de acercar a las personas a través del móvil y crear una relación fuera de él.