Líneas fluorescentes son la nueva forma de iluminar en las carreteras de Holanda. En la autopista N329 se puede ver ahora las marcas viales que brillan por la noche e dan luz a la calzada. Desde hace unos días se está realizando una prueba piloto con líneas que se nutren de la luz del sol durante el día y que cuando este se esconde, se ven de un color verde neón que sustituye a las farolas.
La pintura puede llegar a brillar durante ocho horas en la oscuridad. La prueba forma parte del »Studio Roosegaarde». El objetivo es ahorrar luz de las farolas, aunque el este experimento se enfrenta a un obstáculo: los días nublados.
Por ahora, esta pintura fluorescente se ha colocado en 500 metros de una carretera cercana a la ciudad Oss y se está probando su resistencia y durabilidad del material.
El cerebro de este proyecto es el artista Daan Roosegaarde que ya está preparando otras formas de hacer a las carreteras “inteligentes”: usar pintura termodinámica para alertar a los conductores cuando haya riesgo de heladas con dibujos de copos de nieve en las calzadas.