«Que no soplo, que voy cargada de chupitos y voy a reventar el aparato». Con esta excusa, o confesión, una mujer de Pontevedra se negó a pasar el control de alcoholemia al que quiso someterla la policía local. Según publica este martes »La Voz de Galicia», la mujer fue detenida después de arremeter con su vehículo el coche de su pareja.
Después del incidente, varias patrullas de la Policía Local de Pontevedra se dispusieron a encontrar el vehículo de la mujer, un Seat Ibiza. Cuando fue localizado, los policías observaron que su ocupante mostraba nerviosismo y claros síntomas de embriaguez.
Al intentar realizar la prueba de alcoholemia, la ocupante del vehículo se negó tajantemente: «Que no tío. Que no soplo, que voy cargada de chupitos y voy a reventar el aparato». Fue detenida después de los hechos.