La doctora especialista en Pediatría Josefa Magdalena Borrero ha admitido en el juicio contra José Bretón, acusado de matar a sus hijos Ruth y José, que mezclar pastillas, como Orfidal y Motiván, y suministrarlas a los niños es “en teoría” un “cóctel mortal”.
No obstante, la especialista ha subrayado que «no hay ninguna prueba» de que el acusado suministrara ambos medicamentos a sus hijos.
En el caso de hubiera administrado las pastillas, en función de la cantidad que hubieran ingerido cada uno, podría haber causado desde “una somnolencia muy profunda, a un estado de coma e incluso a la muerte”.
Jorge Moreno, otro médico forese, ha indicado que el Orfidal es un medicamento indicado para el tratamiento de la ansiedad en adultos y que, normalmente, no se prescribe a los niños de corta edad.