Una explosión de artefactos pirotécnicos que se iban a utilizar en una fiesta religiosa en Penacova, en el centro de Portugal, causó hoy un muerto y 24 heridos, de los cuales dos están en estado crítico y tres graves.
Según explicó en declaraciones a periodistas el comandante de Protección Civil Carlos Tavares, entre los heridos leves hay cinco niños.
Los cinco niños fueron trasladados al Hospital Pediátrico de Coimbra y el resto de heridos al Centro Hospitalario y Universitario de Coimbra.
La explosión se produjo cuando un grupo de personas abandonaba una capilla tras una misa y se preparaba para una procesión, durante la que se iban a lanzar los artefactos pirotécnicos.
Por el momento se desconoce la causa del accidente, aunque Protección Civil baraja la posibilidad de que «algo fuese mal» cuando se estaban manipulando los artefactos.