-Acaba el interrogatorio a José Bretón y concluye la segunda sesión del juicio. La vista se reanuda mañana miércoles con la declaración de la madre de los pequeños, Ruth Ortiz.
-El acusado vuelve a hacer una defensa de su papel de padre. «Daría la vida por ellos. No me costaría ningún trabajo».
–José Bretón habla de la relación con Ruth. Explica que ella era la que «planificaba todo» y tomana las decisiones y defiende su dedicación a su familia. «Yo dejé mi trabajo aquí para ir a Huelva por amor a mi familia».
-El acusado dice que el comisario que dirigió la investigación le ofreció sacarle de Córdoba y falsificar informes para que dijera dónde estaban los niños.
-José Bretón asegura que en ningún momento le dijo al primo de Ruth que los niños estaban muertos. Sí que le pidió que acudiera a verle su exmujer Ruth.
-El acusado sostiene que desde el primer momento vio en la hoguera «tizones negros». Alude a que la forense de la Policía dijo después en su informe que eran restos de pequeños roedores.
-Empieza el interrogatorio el abogado de la defensa. Le pregunta por la hoguera y la mesa que empleó. Bretón dice que la estatura de su hija era casi el doble de esa mesa. Explica que utilizaba esa mesa de forma inclinada para que haya hueco y quemaran mejor los troncos.
-A preguntas de la abogada de la acusación, Bretón niega haber dicho que si salía de la cárcel encontraría a sus hijos.
-El juez pide de nuevo a Bretón que deje de hacer alegatos al jurado popular.
-Bretón niega que apagara el teléfono el día de la desaparición de los niños o que borrara llamadas. «Nunca apagué el teléfono. No tenía por qué estar ilocalizado».
-El acusado hace referencia a unas notas que escribió con impresiones personales que se encontraron en Las Quemadillas. Asegura que alguien las colocó allí de forma intencionada.
-El acusado niega haber dicho a Ruth que le iba a hacer un mausoleo en Las Quemadillas. Bretón se dirige al jurado y les dice que sus niños «son los más guapos del mundo entero».
-La abogada le pregunta a Bretón si metió en la candela a los niños vivos o muertos. El juez presidente del tribunal le interrumpe y le reprocha que esa pregunta es capciosa.
-El acusado cuestiona los informes de la acusación sobre el uso de sus móviles. El juez le llama al orden y le pide que deje de hacer de abogado y de dudas de periciales.
–Bretón explica que el mismo día que lo detuvieron, encontró un papel debajo de la puerta de su casa. «Decía que tenían información de mis hijos». Pero no lo llevó a la Policía porque se pedía en la nota que se devolviera el papel.
-La acusación particula pregunta por las garrafas de gasóleo que compró. Desde el 15 de septiembre al 11 de octubre compró 200 litros. Bretón se defiende con el mismo argumento que antes, que el coche necesita gasoil y que le sale más barato así. Añade que en la finca quedó combustible, pero la Policía no encontró nada.
-Sobre la hoguera de Las Quemadillas, la letrada le pregunta por qué puso una mesa. Bretón reitera que quemó con «papeles de periódicos y ramas finas y gruesas» cosas de una bolsa que había dejado Ruth y agrega que ese verano había hecho limpieza en la finca. «La hoguera era de poco más de medio metro y redonda», se defiende Bretón. Empleó la mesa para recoger la candela como «otras veces».
-La letrada le pregunta por el consumo de medicamentos. Repite que no tomó fármacos. Rechaza haber pensado que si los niños desaparecían, Ruth volvería con él.
-La abogada de Ruth Ortiz, que ejerce la acusación particular, ha comenzado el interrogatorio a José Bretón. Le pregunta por qué les busca en la Ciudad de los Niños si se perdieron en el parque Cruz Conde. Bretón alude en ese momento que hay personas que saben dónde están sus hijos.
-Bretón insiste en que no mató a sus hijos, porque son su «vida». Lamenta no haber podido hacer nada para encontrar a sus hijos, porque no le han dejado. «Si yo estuviera en libertad haría todo lo posible».
–La fiscal lee unas notas que Bretón escribió y que aparecieron en las Quemadilla, en las que muestra su dolor por la separación. «Mi único malestar era no estar cerca de mis hijos. No odié a mi mujer».
-El acusado niega que le dijera a un policía, en Las Quemadillas, cuando miraba a la hoguera que sus hijos estaban «cerca».
-José Bretón asegura que ha pedido a su familia que gasten todo el capital ahorrado para buscar a sus hijos. Acusa a la Policía de impedirlo: «Si mi familia no ha buscado a los niños ha sido porque la policía les ha dicho que no intervinieran. No podían hacer nada»
-La representante del Ministerio Público vuelve a preguntarle por la hoguera de Las Quemadillas y si la usó para sus hijos. Lo rechaza tajantemente: «Yo no quemé a mis hijos. Los quiero con locura. Este año y medio no he podido hacer nada por encontrarlos. Le he dicho a mi familia que busquen a mis hijos».
-Se reanuda la sesión. Bretón relata lo que hizo tras perder de vista a sus hijos. El acusado niega que evitara las cámaras de seguridad del recinto y decide ampliar su búsqueda a más zonas.
-El juez presidente del tribunal acuerda hacer un receso de 15 minutos.
«Mis hijos se mezclaron con gente y los dejé de ver hasta hoy»
-Bretón sostiene que quedó en el parque con su hermano, pero no sabe concretar ni hora, ni lugar. Sobre el momento en el que los perdió de vista, cuenta lo siguiente: «Mis hijos iban delante, se mezclan con un grupo de personas y los dejo de ver hasta el día de hoy». Mientras explica esta versión de los hechos, mira en todo momento al jurado. José Bretón sostiene que se sentó en una baranda desde donde controlaba a los niños. Cuando los perdió de vista, se puso a buscarlos como «un loco».
–La fiscal le pregunta por el momento en el que decide irse supuestamente al parque Cruz Conde de Córdoba. Explica que antes de llegar al parque mandó mensajes a su hermano en los que le comentaba que había mucha gente.
-Bretón dice que salió de la finca a las 17:30 horas para dirigirse al parque con los niños.
-La fiscal le pregunta por la pira funeraria de Las Quemadillas:
–«¿Quemó a sus hijos en esa hoguera con una plancha de metal?». Bretón responde con el mismo mensaje cuando niega las acusaciones: «Eso que está usted diciendo es completamente falso».
-Bretón explica que hizo una parada en Las Quemadillas cuando salió de casa de sus padres. Según cuenta El Día de Córdoba, él hacía tareas mientras sus hijos dormían en el coche. Sobre la hoguera que hizo en el patio: «En la hoguera quemé ropa y apuntes de Ruth que había en unas bolsas». El acusado sostiene que ese día no quemó ningún animal y añade que permaneció unos 20 minutos ante la candela.
-El acusado niega que se trasladara a la finca Las Quemadillas por la mañana del 8 de octubre, el día de la desaparición de los pequeños. Bretón sostiene que esa mañana no salió de la casa de su hermana «en ningún momento», aunque la fiscal cita a un testigo que lo vio en la finca.
-José Bretón explica que le regaló flores a Ruth y le entregó una carta en la que le pedía volver, porque quería «ser una familia» y ver criar a sus hijos. «Le pedí a Ruth volver para no separarme de los niños».
-Sobre el fin de semana de la desaparición, Bretón explica que dejó en casa de su hermana a los pequeños para que jugaran con sus primos. Ese fin de semana le correspondía estar en Córdoba con los niños, pero Ruth pidió a Bretón cambiarlo para que así los menores pudiesen asistir al bautizo de su primo. El acusado lo rechazó porque quería mantener los fines de semana alternos.
–Bretón reconoce que compró garrafas de gasoil y que las guardaba en el coche. Justifica que comprara los litros de combustible porque de esa manera el coste le resultaba más asequible.
-El acusado se refiere en presente cuando habla de sus hijos.
-Bretón admite que fue al psiquiatra por sus «manías» y asegura que es «falso» que suministrase tranquilizantes a sus hijos. El procesado asegura que tiró las pastillas cuando se las recetó el psiaquiatra. Se trata de una contradicción, porque en la fase de instrucción no supo responder qué hizo con esos fármacos. A la pregunta de si las compró para dárselas a sus niños, responde: «Eso es completamente falso».
–«Ruth era la persona en la que más confiaba», sostiene Bretón.
-José Bretón señala que no se esperaba que Ruth le dijera que quería separarse. «Me dijo que lo nuestro fue un error y me sorprendió mucho». El acusado niega que en el cumpleaños de Ruth insultara a la madre de los pequeños, a pesar de que en la fase de instrucción se relató lo contrario.
«Tener hijos la sido la mayor alegría de mi vida»
-«Yo era quien le preparaba los biberones a mi hija», relata Bretón, que añade que al pequeño José, lo ha criado él. José Bretón niega que sus hijos le tuvieran miedo: «Mis hijos no me temen y yo les quiero con locura»
-José Bretón llora al recordar a sus hijos. Dice que se considera un «buen padre», que se ocupaba de todo lo que necesitaban sus «niños» y que el pequeño se abrazaba a él cuando salía de la guardería. Se le quiebra la voz cuando contesta a la fiscal y dice que sus hijos no le tenían miedo.
Sobre el papel de la madre Ruth, señala que «salvo la ducha», él se dedicaba a todo en sus hijos. José Bretón sostiene que nunca nadie había puesto en duda su papel de padre, ni los valores educativos que les transmitía. «Mi niña cuando tiene sed, me dice papa agua», asegura el acusado dirigiéndose al jurado.
-Bretón asegura que tener hijos ha sido «la mayor alegría» de su vida. Según informa Telecinco, el acusado ha comenzado a llorar en la sala al referirse a sus dos hijos Ruth y José.
-Sobre la relación con Ruth Ortiz, asegura que tenía «una relación plana y sin altibajos». Bretón explica que se enamoró de Ruth Ortiz porque creía que era una «buena persona» y pensaba que ella confiaba en él. Según cuenta, pensaba que la madre de sus hijos no iba a dejarse influenciar por terceras personas. «Yo quiero una persona que tenga personalidad, que no se deje influenciar por nadie, que tenga sus propios valores y los defienda siempre».
«Mi relación con Ruth era plana y sin altibajos»
–José Bretón comienza a declarar. Responde a las preguntas de la fiscal. «Me considero una persona tranquila», dice Bretón, que comparece tranquilo e impasible. «No me enfado con facilidad».
-El presidente del tribunal ha preguntado a José Bretón si quiere declarar. El acusado ha respondido con un sí. Comienza la declaración.
–La abogada de Ruth Ortiz ha señalado a su llegada a los juzgados que esta jornada no va a servir para nada, porque Bretón no va a cambiar su versión de los hechos.
-Bretón conoce el sumario a la perfección. Además de leer los libros de autoayuda, ha estudiado los tomos del sumario. Según cuenta Antena 3 en Espejo Público, quiere tener el control de toda la línea de defensa y en alguna ocasión ha chocado con su letrado.
-La defensa de Bretón, ejercida por el abogado José María Sánchez de Puerta, asegura que el acusado no va a cambiar su versión de los hechos y dirá al jurado que perdió a sus hijos en el parque. Asegura que su cliente está «tranquilo».
-Empiezan a llegar furgones policiales a los juzgados de Córdoba. Previsiblemente, habrá llegado José Bretón hasta las dependencias judiciales. Bretón tendrá que contestar a las preguntas del fiscal, de la acusación particular y de la defensa. Mañana será el turno de la madre de los menores, Ruth Ortiz.
José Bretón declara este martes en la Audiencia de Córdoba y ante el jurado popular que le juzga por los asesinatos de sus dos hijos Ruth y José de seis y dos años. Se enfrenta a 40 años de cárcel por un doble asesinato con el agravante de parentesco, de sus dos hijos menores.
El juicio por jurado arrancó ayer lunes con la constitución del jurado, integrado por siete mujeres y dos hombres. Bretón deberá comparecer ante el jurado y el tribunal, sentado en el banquillo, el mismo lugar donde escuchó sin parpadear los cargos que se le imputan. En su declaración, el padre de los niños mantendrá la versión de que perdió a los niños en el parque de Córdoba y que los pequeños están vivos. José Bretón tacha de «cuento» el proceso judicial contra él, pero da por sentado de que le van a condenar.
La Fiscalía tiene claro que Bretón es el asesino de los pequeños. La representante del Ministerio Fiscal en el juicio, María Ángeles Rojas, aseguró ayer en su alegato que no tenía duda alguna de que Bretón asesinó a sus hijos de la forma más «cruel» posible y que el acusado se ha inventado un «cuento» y una «fantasía» para declararse inocente.
La acusación particular cree que Bretón quería matar también a la madre de los niños. María del Reposo Carrero, la abogada, sostiene que el acusado tenía la intención de quemar a su exmujer, Ruth Ortiz, en la pira donde supuestamente quemó a los pequeños.
La línea de defensa del padre de los pequeños desaparecidos el 8 de octubre de 2011 es que los perdió en el parque, pero las cámaras de seguridad del recinto mostraron imágenes en las que se le ve que José Bretón llegó solo.
La cámara del parque Cruz Conde de Córdoba es una prueba técnica de peso para la Fiscalía. A través de estas imágenes, intenta demostrar que Bretón llegó solo, sin sus hijos.
La otra prueba de cargo es el informe forense de Francisco Etxeberría, que señaló que los restos óseos encontrados en la hoguera de la finca de Las Quemadillas corresponden a huesos de niños, que se corresponden con edades de los desaparecidos.
El juez instructor de la causa se basó en este informe para acusar a Bretón de dos delitos de asesinato con alevosía de sus hijos. La Policía destituyó a la forense que concluyó que los restos de la hoguera correspondían a animales.
Según uno de los puntos del auto de hechos justificables dictado por el juez instructor, “el acusado, conforme a lo que ya tenía previsto y meditado, prevaliéndose de su condición de padre y de su mayor fortaleza física, confianza y autoridad, acabó con la vida de sus hijos Ruth y José B. O., de manera no determinada, y prendió una hoguera cuyos elementos esenciales ya tenía preparados, en un lugar nuevo de la finca, entre dos naranjos y sin visibilidad desde el exterior”.
El abogado de Bretón, José María Sánchez de Puerta, intentará en el juicio desmontar esta la prueba forense alegando que se rompió la cadena de custodia, y que se depositaron esos restos intencionadamente en Las Quemadillas.
José Bretón se ha llegado a calificar como el asesino más frío de España. Este hombre menudo, de profesión militar y con experiencia en Bosnia, es una persona manipuladora y distante, de pensamiento machista y narcisista. Psiquiatras y psicólogos forenses creen que Bretón actuó supuestamente por venganza para castigar a la madre de los pequeños por la separación.